Las redes que echan al mar son tan
grandes que arrastran todo lo que encuentran. Destruyen el fondo del mar, donde
crecen las algas… Destruyen los bosques de coral… Atrapan pulpos, anguilas,
cangrejos, tortugas, esponjas, erizos, estrellas de mar… ¡Todo!
FRANCISCO ¡Paz y felicidad para ustedes, que me escuchan! Soy Francisco de Asís. Viví hace muchos años en Italia, cuando el mundo era más tranquilo. Pero ahora he sido contratado por mi tocayo el Papa Francisco, que también vive en Italia, para conocer y dar a conocer los problemas urgentes, muy urgentes, que están poniendo en peligro nuestra casa común. ¿Saben dónde estoy? En las costas de un país llamado Chile… A orillas del mar… Al sur, bien al sur, lo conocen como Puerto Montt… A este muelle llegan los barcos de los pescadores… Pero yo quiero hablar con los pescados… bueno, con los que todavía no están pescados. En mi tiempo yo hablaba con los peces del lago Trasimeno. Voy a sentarme y a esperar… ¡Ey!... Este pez no lo conozco… A ver si salta otra vez… Psst… psst… Acércate y dime quién eres…
MERLUZA Soy una merluza. ¿Y tú?
FRANCISCO Yo vengo de lejos. Me llamo Francisco. Y
estoy buscando noticias de lo que pasa en estos mares.
MERLUZA
Pues yo estoy buscando a toda mi familia, mi familia de merluzas.
FRANCISCO
¿Qué le pasó a tu familia?
MERLUZA Están dentro de aquel barco… ¿lo ves?
Todas fueron capturadas, todas murieron. Pescaron a casi todo mi grupo.
MERLUZA No, Francisco. Ahora pescan con redes
gigantes. Salen al mar con barcos enormes. Mira a aquél que tiene una bandera
roja… Y aquel otro con la bandera blanca y la bolita roja….
FRANCISCO
¿Y qué hacen esos barcos?
MERLUZA Las redes que echan al mar son tan
grandes que arrastran todo lo que encuentran. Destruyen el fondo del mar, donde
crecen las algas… Destruyen los bosques de coral… Atrapan pulpos, anguilas,
cangrejos, tortugas, esponjas, erizos, estrellas de mar… ¡Todo!
FRANCISCO
¿Y todo eso se come?
MERLUZA No, solo les interesan los peces
grandes como nosotras las merluzas. Lo demás lo arrojan por la borda, los peces
pequeños, todas las criaturas del mar. Unas vivas, la mayoría ya muertas. Pesca
de arrastre y descarte, así la llaman.
FRANCISCO
Ah, descarte también en el mar… Lo que dice el Papa…
MERLUZA
Los pescadores artesanales se están quedando sin trabajo…
FRANCISCO
Hermana merluza… y ese otro que se acerca, ¿quién es?
MERLUZA Ese es el famoso congrio chileno…
CONGRIO Puedo hablar contigo también. Ya me
enteré que te llamas Francisco. Pues sí, soy el congrio. Conmigo puedes hacer
un caldillo riquísimo, que te chupas los dedos.
FRANCISCO
¿También vienes a buscar a tu familia?
CONGRIO No, vengo a buscar comida.
FRANCISCO
Tú plateada, hermana Merluza, y tú dorado, hermano Congrio… hermosas criaturas
de Dios. Y dime, ¿se te acabó la comida en un mar tan inmenso como éste?
CONGRIO Nuestras desgracias son grandes,
Francisco. Esas redes de arrastre que dice mi colega la merluza son asesinas,
acaban con todo. Me quitan también la comida. Rompen la cadena.
FRANCISCO
¿De qué cadena me hablas?
CONGRIO Dentro de poco, ustedes los humanos
no tendrán ni caldo ni caldillo, ni pescada ni pescadilla. El mar se va a
quedar sin peces.
MERLUZA Atiende, Francisco. La vida es como
una cadena. Cada eslabón sostiene al eslabón siguiente y se sostiene en el de
atrás. Si se rompe un eslabón, cualquiera, los demás desaparecen.
CONGRIO El mar donde nadamos está lleno de
unas plantitas chiquitas. Ni las ves. Plancton las llaman. Son algas pequeñitas
que comen luz, se alimentan de los rayos del Sol.
FRANCISCO
Lo mismo que hacen los árboles en la tierra… Eso me lo explicaron en los llanos
de Venezuela.
MERLUZA Vas aprendiendo muchas cosas nuevas,
Francisco. Pues resulta que esas plantitas las comen animalitos más grandes.
Sobre todo, el krill.
FRANCISCO ¿Y ese krill quién es?
CONGRIO Son unos camaroncitos pequeñitos. Hay
millones y millones. Los comen los peces grandes, las focas, los pingüinos, las
gaviotas, a las ballenas les encantan… ¿te decimos un secreto?
MERLUZA Ese Papa amigo tuyo que vive en Roma
toma todos los días en su desayuno aceite de krill. Por eso tiene tanta
energía.
FRANCISCO
¿No me digas? Pero sigue, sigue con la historia de la cadena…
CONGRIO Pues que el krill come algas y los
peces comen krill y los tiburones comen peces y… si falta un eslabón en esa
cadena se mueren todos.
FRANCISCO Ah… y la cadena la rompen esos barcos
malditos, los que acabaron con tu familia, hermana merluza.
CONGRIO Y hay otro problema, Francisco.
FRANCISCO
¿Otro más?
MERLUZA Que el mar se está calentando por esa
enfermedad del cambio climático.
FRANCISCO
Ya me hablaron de ella… ¿y en qué les afecta a ustedes, hermanos peces?
CONGRIO Que cuando el mar se calienta, se
mueren las algas pequeñitas que viven en la superficie, que son las que
alimentan al krill que nos alimenta a nosotros.
MERLUZA Y aunque son tan pequeñitas, esas
algas son las que limpian el aire del mundo.
PERIODISTA
Se calcula que la mitad de los gases de efecto invernadero responsables del
calentamiento global es absorbida por las algas que viven en la superficie de
los mares. Ellas convierten el aire contaminado en oxígeno limpio.
CONGRIO Si las algas mueren ya no pueden
limpiar nada… Y el agua de los mares se enferma, se vuelve ácida…
PERIODISTA
Estudios realizados por Jacques Costeau demostraron que la pesca de arrastre y
la contaminación han hecho desaparecer el 40 por ciento de las criaturas
marinas. Si esto sigue así en 25 años más no habrá vida en los océanos.
CONGRIO
¿Te das cuenta de lo importantes que son las algas pequeñitas?
FRANCISCO
Sí, y veo que la “cadena” siempre se rompe por lo más débil.… Ustedes qué
creen, hermanos peces, ¿estaremos a tiempo?
MERLUZA Depende de tus hermanos humanos,
Francisco…
CONGRIO Si no cambian, ¿qué van a comer? Si
no cambian, ¡hasta tu tocayo de Roma se quedará sin desayuno!
Dice
el Papa Francisco en la encíclica Laudato Si, Alabado Seas:
La
vida en los ríos, lagos, mares y océanos, que alimenta a gran parte de la
población mundial, se ve afectada por el descontrol en la extracción de los
recursos pesqueros, que provoca disminuciones drásticas de algunas especies.
Todavía siguen desarrollándose formas selectivas de pesca que desperdician gran
parte de las especies recogidas. Están especialmente amenazados organismos
marinos que no tenemos en cuenta, como ciertas formas de plancton que
constituyen un componente muy importante en la cadena alimentaria marina, y de
las cuales dependen, en definitiva, especies que utilizamos para alimentarnos…
En algunas zonas costeras, es preocupante la desaparición de los ecosistemas
constituidos por manglares… Muchas de las barreras de coral del mundo hoy ya
son estériles o están en un continuo estado de declinación: ¿Quién ha
convertido el maravilloso mundo marino en cementerios subacuáticos despojados
de vida y de color? (Laudato Si 40, 39, 41)
Y
dijo el Papa Francisco en el Encuentro con los Movimientos Populares en
Bolivia:
La
primera tarea es poner la economía al servicio de los pueblos: los seres
humanos y la naturaleza no deben estar al servicio del dinero. Digamos NO a una
economía de exclusión e inequidad donde el dinero reina en lugar de servir. Esa
economía mata. Esa economía excluye. Esa economía destruye la Madre Tierra.
PREGUNTAS PARA EL DEBATE
1- ¿Qué peces se comen en la zona donde
vives? ¿Sabes con qué método los pescan?
2- ¿En tu país hay leyes que regulan los
métodos de pesca (arrastre, dinamita y otros dañinos al medio ambiente)?
3- ¿Puedes describir la cadena
alimenticia que te alimenta a ti y a tu familia? ¿Dónde comienza? ¿Qué
eslabones tiene?