Pueden
ustedes elegir. Aquí tienen cuatro imágenes de la Virgen María. Podríamos decir
que dos “celestiales” y dos” terrenales”
Una
de las muchas pintadas por Murillo que se contemplan en varias iglesias y
museos de España. Un rostro andaluz y unos angelitos gordinflones rodeándola
entre nubes
Otra
la Virgen de Guadalupe en su santuario de México, Virgen morena de rasgos indígenas.
La
leyenda dice que pintada milagrosamente sobre la capa de Juan Diego…
Una
tercera, dibujo de una mujer nazarena/
¿de Nazaret puede salir algo bueno? Con
el vestido de entonces, el rostro cubierto cuando sale camino de la
fuente…
La
mujer relegada, sin poder hacer acto de presenció en la sociedad de su tiempo
Y
finalmente fotografía de una mujer
campesina de aquellas
tierras en la época actual
Cuando nos hablan de la virgen María
¿qué imagen se nos enciende en la cabeza?
Podemos
preguntarnos si en las figuras “piadosas”
que tenemos en nuestras casas no predominan las que son producto de artistas sin mucho interés por el realismo y la memoria
histórica y mayor preocupación por lo que llamamos el cielo o los simbolismo
que consideramos espirituales… pero ¿qué es lo espiritual para nosotros?
Piensen,
elijan, imaginen… pónganse en lugar de
quienes empezaron a vivir la fe
en Jesús con signos, imágenes,
representaciones muy distintas a los que
hoy utiliza “la gente religiosa”
¿Qué
efectos puede tener esa imaginería en nuestra espiritualidad cristiana?