Para Otro Mundo Posible
Comunicación
Somos seres humanos con ojos, oídos, boca, un cuerpo hábil en mostrar gestos expresivos, unas manos con las que dibujamos , hacemos escultura y según avanza la técnica, fotos, cine, y un sinfín de imágenes y signos para…
Comunicar
No Serán las palabras,
Las señales y cantos, los libros y emisoras
Trampas donde unos pocos
Hagan del pueblo masa.
Las pantallas y antenas
Nos servirán a todos
para oír y expresar la verdad y el cariño,
para abrir horizontes
que nos muestren posible
el cambio de la historia;
y así el comunicarse
será hacer, entre todos,
nuestro mundo común.
DESDE LA VIDA
A cualquier cosa se llama hoy comunicación.
Los seres humanos tenemos unos sentidos que nos ayudan a asomarnos al mundo en que vivimos: los conocidos cinco sentidos más esos otros “sextos sentidos” que intenta abordar la parapsicología, pero que nos desbordan a muchos..
La primera comunicación de todo ser que nace, es el tacto,: las caricias, o los golpes, el gusto, el olfato… esa comunicación no nos abandonará en nuestra vida aunque al ir creciendo nuestros ojos y oídos nos aparecerán como los principales medios de “comunicación”. Medios para recibir y emitir.
Desde niños nos van enseñando el lenguaje y aprendemos a escribir y a pintar… Pero desde niños nos suele pasar que casi siempre son unos pocos quienes nos hablan y también nos enseñan a “oír, ver, y callar” porque los únicos que pueden hablar son ellos.
Esto nos sucede en los tres tipos de comunicación que existen en la humanidad:
- Personal: de boca a oído, en la familia, entre amigos
- De grupo: en la escuela, en los equipos de trabajo, en las asociaciones…
- De masa: lo que, con los avanzados medios de comunicación “Masiva” flota hoy por encima de nosotros – y se nos mete, casi sin darnos cuenta en nuestras cabezas y corazones.
Lo malo de estas comunicaciones es que en demasiados casos siempre hay alguno o algunos que hablan y los otros escuchan. Porque puede suceder que:
- En la comunicación personal
Quien más sabe, quien más tiene facilita de palabra, o grita más o es más astuto, hábil, duro e irónico o tiene un cargo más alto, deja al otro con boca cerrada. Uno habla. El otro se limita a oír, ver y callar, o decir que sí, amén.
- En la comunicación de grupos
Sucede a veces lo mismo: el maestro enseña seguro de que quienes asisten a su enseñanza no tienen nada para comunicar. En las comunidades de cualquier tipo, el “superior”, el jefe, el párroco, el predicador puede quedarse con la palabra y a los demás solo les toca obedecer, oír, ver y callar.
- Comunicación de masas
Sucede más en la llamada comunicación de masas, allá quien paga manda. Lo que deciden los dueños que exista, existe. Lo demás queda oculto en la bruma del silencio.
Seguramente algo así les ha sucedido a ustedes: Asistieron a un acontecimiento que les pareció muy interesante, una iniciativa importante para el país o la humanidad. Al día siguiente buscan en el periódico y allí no cuentan nada.
Esperan al informativo de la televisión (habían visto cámaras filmando el acontecimiento) y no presenta ninguna imagen del hecho o solo aparecen unos segundos mientras la voz del locutor habla del suceso quitándole importancia o desfigurándolo.
Sucede algo irónico. Muchos amigos que dicen no creer en los medios de comunicación, opinan luego sobre situaciones y personas tal como se lo ha contado la televisión o la prensa. No se dan cuenta de que ese aparatito en el que “dicen no creer” es el que les facilita opiniones e informes que luego ellos expresan sin darse cuenta de dónde las han sacado, de que son la voz de su amo
No quiero dar nombres, pero he comprobado que las opiniones de mucha gente, incluso progresista, sobre ciertos líderes de países en el tercer mundo no tienen más base informativa que la proporcionada por los “medios de masa”.
Estos, más que medios, en realidad son intermediarios. Como en el comercio, el intermediario está en medio: entre el acontecimiento que sucedió y el receptor al que llega la noticia. Eso hace que los informes lleguen al público contaminado, porque quien los comunica enfoca la información según le interesa al susodicho intermediario.
Algunos luchadores por la verdad se arriesgan a organizar medios de comunicación “alternativos”. Son medios que intentan contrarrestar la visión manipulada por los intereses de quienes manejan los países.
Ciertos artistas, periodistas, locutores, realizadores de la TV se arriesgan a mostrar en sus programas lo que quienes dominan la empresa no quieren que aparezca. Con frecuencia sus emisiones suelen durar poco. Pronto les dicen que ya no hay tiempo para esa retransmisión, que no tienen interés, que falta presupuesto… y su voz desaparece de la antena.
Hay ocasiones en que no solo desaparece su voz. También la persona que se atrevió a decir lo que no gusta desaparece violentamente en extraños accidentes o en evidentes atentados que se intentan atribuir a la “delincuencia común”.
Este no solo les sucede a los informadores sino también a humoristas y poetas que son molestos con sus expresiones irreverentes contra el poder.
- No callarán los profetas
Pero, entre la selva de voces acomodadas a los intereses de quienes mantienen el mundo en el individualismo y la sumisión, siguen levantándose antenas como lanzas; voces rebeldes afirmando que otra información es posible, y que es necesaria si queremos que sea otro mundo posible.
Para que avance esa información alternativa y no nos dejemos engañar necesitamos varias condiciones:
Que aprendamos a leer (escuchar, ver) críticamente los medios de comunicación. La solución no es negarse a ver tele o cine, leer periódicos, etc. Cerrar los ojos y oídos no sirve para nada. Es cuestión de saber “leer entre líneas”. Mirar por detrás del tapiz para descubrir los nudos y las costuras interesadas que han hecho quienes nos los presentan con sus intenciones particulares.
- Frases del ministro de Hitler Joseph Goebbls
- „Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá.“
- „Más vale una mentira que no pueda ser desmentida que una verdad inverosímil.“
- „¡Una mentira repetida mil veces se convierte en una realidad.!“
- Además es muy importante descubrir a los lobos con piel de oveja. Es decir, los programas que, aunque no siempre mienten, distraen a los espectadores de prestar atención a la realidad, o cuentan historias aparentemente intrascendentes que llevan en la cola el veneno. Los sociólogos de la información suelen poner como ejemplo el filme de Walt Disney: “El rey león” que con aparente inocencia plantea una sociedad, la única posible parece ser, donde todos rinden sumisión y escuchan humildemente al todopoderoso y rubio león y a su hijo( made in U.S.A) en contra de esos villanos de piel morena, barba retorcida y la media luna del islam protegiendo sus fechorías (¿les suena?). Apuesto a que aún hoy día cuando ustedes leen las noticias sobre Siria, Irán e Irak y los bombardeos de Estados unidos contra esos países, la imaginación inconsciente de muchos tiene presente al malvado enemigo de rostro islámico del santo rey León.. Del mismo modo, algunas revistas y emisoras “religiosas” ayudan a que las personas floten en el aire con sus “espiritualismos”, lejos del verdadero espíritu: el viento que ayuda a caminar con los pies en la tierra.
- Por otra parte asoman los “sensacionalismos religiosos”. Hace años apareció un libro opinando que Jesús había muerto en la india. . Porque el interés de estos productos es que se hable mucho de ellos, a favor o en contra, pero que se hable. La técnica de estos “escándalos” religiosos es la de hacer picar a fieles y agnósticos de todo tipo. El sistema es sencillo: se publica un libro (generalmente con la película correspondiente al poco tiempo) y se procura que alguien se escandalice, suele ser gente asustadiza o alguien que lo aparenta. Eso atrae al público. Empieza a correo por los diarios y las radios la noticia de que se ha publicado algo escandaloso que ataca la religión. La publicidad está servida. Empiezan a preguntarse unos a otros: -“Oye ¿has leído…….?
- Pero hay otros pescadores que aprovechan mejor todo este río revuelto religioso. Y me parece que este es el fondo de la cuestión: Los teólogos, los pastores, las parroquias y comunidades cristianas, después del concilio Vaticano II y las asambleas de Medellín y Puebla se habían centrado en que la fe en Jesús no es algo flotando entre nubes sino el amor a Dios, según un viejo “best seller” llamado “Evangelio de Jesús”que nos pedía unir inseparables el amor a Dios con el amor al prójimo.
- El amor al prójimo no es solo dar limosna, sino ayudar a que todos los prójimos seamos iguales, hermanos, compartiendo los bienes y oponiéndonos a las estructuras injustas que crean este trágico mundo de triunfadores y marginados. Esto se puede llamar teología de la liberación o simplemente sentido común evangélico. Y preocupa mucho a quienes prefieren que la religión deje los ojos cerrados. Desde entonces han surgido muchas iniciativas para seguir echando nubes de humo sobre las sencillas propuestas del evangelio para que no se entiendan. Hasta que inoportunamente ha aparecido un tal Francisco abriendo el baúl olvidado del concilio.
- Entre otros medios, los sistemas sensacionalistas de la prensa, la televisión… no son los pobres quienes los manejan, la gente se distrae, discute… y se olvida de las claras palabras de Jesús: “Ay de ustedes los ricos… lo que hagan al más pequeño de mis hermanos a mí me lo hicieron…” Tanto los que escriben a favor como los que escriben en contra de los últimos escándalos literarios consiguen lo que se quería: Que el mensaje de Jesús y su anuncio del reino de Dios, de justicia, amor, de hermandad, de comunidad… que todo eso se quede en el baúl del olvido. Todo esto nos lleva a lo que dijimos antes. Que debemos aprender a distinguir qué buscan los que mueven al público al son que ellos tocan. Vale como orientación ¿verdad? Pues podemos pasar a otra exigencia en nuestro camino hacia la comunicación alternativa.:
Que sepamos elegir los medios que nos dan más garantías por estar al servicio de los oprimidos y marginados
Es muy difícil que un medio de comunicación o cualquiera de nosotros seamos totalmente objetivos. Pero un signo de honradez de la comunicación es que al menos intente ser sincera y objetiva y que, si se equivoca, sea más a favor de los perdedores que de los poderosos.
Los oprimidos de cualquier modo son también quienes no tienen voz. Las voces y las imágenes casi siempre les tapan la boca y deforman sus protestas.
Las agencias informativas no suelen estar de su parte. Detrás de ellas suelen estar los intereses
Cuando un líder político que intenta defender a los más pobres se enfrenta en su país contra quienes dominan el mercado mundial, rápidamente sus defectos son exagerados, sus equivocaciones reales o ficticias son puestas en la picota y junto a las posibles acciones económicas o militares contra ellos cae el martillo del desprestigio y la mentira. Es aquí –como arriba indiqué – donde muchas personas, incluso de los que se dicen defensores de la justicia o “de izquierdas”, caen en la trampa.
- Se trata de buscar programas y movimientos alternativos, realmente populares.
- Busquen, por ejemplo en internet: “Radialistas apasionados y apasionadas” http://www.radialistas.net, asociación sin fines de lucro con sede en Ecuador. Su misión es contribuir a la democratización de las comunicaciones, especialmente de la radio, desde las perspectivas de género y ciudadanía. Se trata de un centro de producción al servicio de “radialistas” de todos los continentes, priorizando América Latina y el Caribe.
Abre un horizonte grande de posibilidades para las producciones radiofónicas y el trabajo de emisoras populares.
Me da pena limitarme a este ejemplo pero en ellos y en otros canales que ustedes ya han descubierto podrán encontrar el trabajo serio de muchos comunicadores. Los que no se conforman con los grandes medios de masa que con demasiada frecuencia arriman el ascua a su sardina… mejor a su tiburón.
Además de analizar y difundir los medios de comunicación es muy importante animar vocaciones de buenos y honestos comunicadores.
Quien tenga clara la necesidad de luchar por este mundo nuevo diferente analice sus capacidades. Que vea si ellas le pueden ayudar a entrar en ese ambiente tan apasionante y revuelto de los medios de comunicación.
Piense en la importancia que ha tenido la educación “formal” de las escuelas y centros de educación. Hoy no la ha dejado de tener, pero ha quedado en buena parte superada por esa otra educación –o deseducación- “informal” que representan hoy los medios audiovisuales y la prensa.
3. ESCUCHANDO LA PALABRA
Mateo 11,25-29
La revelación a los sencillos
“Te bendigo Padre porque has ocultado estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los sencillos” (Mt 11, 25-29)
- Quienes escribimos, predicamos o hablamos por los medios de comunicación, tenemos el peligro de utilizar un lenguaje que solo nos entienden quienes ya lo saben o se mueven en ambientes cultos o de iglesia.
- A la gente que no ha “tenido estudios” pero tienen otros conocimientos y experiencia distintas y a veces más fuertes que las nuestras, no les ayudamos a reflexionar y conocer toda la verdad. Y eso sucede cuando no escuchamos el lenguaje e inquietudes del pueblo.
- Habrá que recordar la repetida frase de Mons. Angelelli, obispo mártir argentino: “Es preciso estar con un oído atento al evangelio y el otro al pueblo”. Muchos predicadores tienen los ojos y los oídos en las nubes.
- “Al momento se le abrieron los oídos, se lo soltó el impedimento de la lengua y hablaba normalmente. Les mandó que no dijeran a nadie; pero cuanto más insistía, más lo pregonaban. Estaban llenos de admiración y comentaban: Todo lo ha hecho bien, hace oír a los sordos, hablar a los mudos” (Mc 7, 35-37)
- ¿De qué “terrazas” hablamos hoy? Esos lugares altos desde donde se escucha la mejor Palabra con libertad pueden ser las antenas, emisoras, medios electrónicos que abarcan el mundo. Se nos muestran como los sistemas más eficaces para ayudar a las personas a conocer, a tomar conciencia de lo que sucede y de cómo cambiar la sociedad encerrada en el silencio y la ignorancia…
- En las organizaciones educativas, transmisoras de la “buena noticia” no hay suficientes miembros que se decidan a trabajar en los medios de comunicación. Se conforman con la escuela, la predicación… mientras…
“El dueño alabó al administrador deshonesto por la astucia con que había actuado.
Porque los hijos de este mundo son más astutos con sus semejantes que los hijos de la luz.
(Lc. 16,8)
- Hay que ver el dinero, equipos, medios, técnicas, preparación que se emplean en una publicidad muchas veces superficial o engañosa. La que atonta e impide tomar conciencia de este mundo y del horizonte que buscamos mientras quienes se interesan por este mundo nuevo, “el reino de Dios” quedan muchas veces pasivos y mudos, a lo más lamentándose.
- Pero siguen quienes desde la terrazas, a la sombra de lo arboles, predican a los pájaros, a los astros, a los desiertos y a todos los buscadores INQUIETOS del mundo confiando en un posible futuro mundo nuevo de Comunicación