Chico Mendes
Trabajador del caucho y mártir
“Si un mensajero del Cielo me garantizara que mi muerte habría de fortalecer
nuestra lucha, podría valer la pena.
Pero la experiencia enseña lo opuesto, así que deseo vivir” .
Chico Mendes, fue asesinado en 1988, era líder de un movimiento que unía la defensa de la región amazónica con la justicia para los pobres que habitaban allí. Vivían en el estado de Acre, en la región amazónica del nordeste del Brasil, donde organizó el gremio de los recolectores de caucho y de otras familias pobres que se ganaban la vida extrayendo los recursos renovables de la selva. El propio Mendes era hijo de un recolector de caucho que llegó al Amazonas para aprovechar el auge del caucho entre las dos guerras mundiales. En años más recientes, el destino de estos trabajadores se vio amenazado por los grandes terratenientes y rancheros que preferían quemar y despejar la selva para dar lugar al ganado.
Mendes comenzó a organizar a los recolectores de caucho en el año 1977. En un principio su objetivo era, simplemente, proteger sus derechos y su subsistencia, pero, de manera, de manera gradual, sus preocupaciones se extendieron hasta abarcar una visión ecológica más amplia. Las quemas de la selva contribuían al “efecto invernadero”, arruinaban la tierra y por último amenazaban la supervivencia de todo el planeta. De esta manera, estableció la conexión entre el “grito del pobre” y el “grito de la tierra”.
Los propietarios recurrieron amenazas y a la violencia para quebrar la voluntad del gremio. Pero las tácticas no violentas de Mendes y sus seguidores comenzaron a atraer el apoyo internacional. El propio Mendes fue amenazado de muerte repetidas veces. Según su esposa, Ilza, “Algunas veces yo le decía a Chico: ¡Chico te van a matar! ¿Por qué no te cuidas y te alejas? Pero Chico no tenía miedo a la muerte. Me dijo que jamás dejaría de defender la selva amazónica; ¡nunca!”
En el año 1987. Chico obtuvo el premio global 500 de las Naciones Unidas para la Protección del Medio Ambiente. Se le llamo el “Gandhi del Amazonas”. Luego de esto el gobierno de Brasil otorgó pronto el estatuto de área de reserva a cuatro áreas de la selva. Pero no fue suficiente para proteger la vida de Chico Mendes, a finales de 1988, le dispararon y fue muerto por un terrateniente y su hijo.
Su esposa observo “Chico tenía mucha fe. Cuando murió, yo estaba llena de desesperación. Pero Dios me consoló y me inspiró a que trabaja junto con otros para llevar adelante la obra de Chico. Lo mataron, pero no pudieron matar sus ideales ni aplastar la lucha”.
Por Rosario Carrera.
Inspirado en el libro Todos los Santos. Robert Ellberg