Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

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8 de septiembre de 2018

MINISTRO, Palabras a Voleo

PALABRAS A VOLEO

En las palabras que solemos lanzar a voleo en este apartado de nuestro blog,  solemos dar preferencia a las palabras de doble cara, que en  los países de tradición religiosa suelen ser bastantes. Una de ellas en la que ahora nos pensamos detener es el vocablo




Ministro

  
La palabra "ministro" viene del latín minister (sirviente), por eso así les decimos a "el que sirve a Dios" y a los que "hacen servicio público". La palabra latina minister (sirviente) viene de la raíz minus, que nos dio en nuestro idioma palabras como: menos, menor, mínimo, minúscula, menú y minuto.

¡Qué contraste! Resulta que  minister  se deriva de minus= menos  y  al contrario  magis es  en latín: más. O sea que magister =maestro es alguien que aparece como “más” y minister= ministro  aparece como”menos”. La pregunta irónica nos sale espontánea: ¿Qué es más importante  un maestro o un ministro?

La respuesta también  nos surge espontánea: ¡Depende!
Hubo un tiempo en que  el pedagogo, no era un  maestro, licenciado en pedagogía, sino el esclavo de confianza  que llevaba al  niño a la escuela.

En algún tiempo también  el esclavo  que tenía su culturilla era quien  se ocupada de enseñar los primeros pasos de la ciencia a los hijos de los señores ricos. .. Así iban subiendo de categoría y pasando de minister  gente que eran como menos en la casa de  los señores, a magister,  pues habían ascendido en el escalafón.

Así van subiendo las palabras de categoría y sentido. 


Hoy no pensamos hablar del maestro y preferimos quedarnos con  la expresión ministro.

Lo que más suena en nuestras sociedades es el sentido de lo ministros del  gobierno.

Poco se les ve a los ministros del  gobierno  como servidores de la sociedad. Al contrario: Después del tiempo de los antiguos reyes o con los actuales gobiernos llamados democráticos, esas personas llamadas ministros no aparecen mucho con el gesto humilde de servidor, sino más bien con el aire altanero y prepotente del “aquí mando yo”.

Es lo que intentamos reflexionar en estas líneas: la falta de consecuncias entre lo que decimos y lo que hacemos. Tal vez recuerden las palabras de Jesús:

"Los discípulos  comenzaron a discutir sobre quién de ellos era el más importante. Jesús les dijo: «Los reyes de las naciones (pueden poner sus ministros) las gobiernan como dueños, y los mismos que las oprimen se hacen llamar bienhechores.

 Pero no será así entre ustedes. Al contrario, el más importante entre ustedes debe portarse como si fuera el último, y el que manda, como si fuera el que sirve. Porque ¿quién es más importante: el que está a la mesa o el que está sirviendo? El que está sentado, por supuesto. Y sin embargo yo estoy entre ustedes como el que sirve." 

Aquí  habla Jesús  con ejemplos dela vida civil. Pero fíjense en  la visión religiosa:

 "Entonces Jesús habló tanto para el pueblo como para sus discípulos: «Los maestros de la Ley y los fariseos han ocupado el puesto que dejó Moisés. Hagan y cumplan todo lo que ellos dicen, pero no los imiten, porque ellos enseñan y no practican. .Preparan pesadas cargas, muy difíciles de llevar, y las echan sobre las espaldas de la gente, pero ellos ni siquiera levantan un dedo para moverlas. Todo lo hacen para ser vistos por los hombres. Miren esas largas citas de la Ley que llevan en la frente, y los largos flecos de su manto. Les gusta ocupar los primeros lugares en los banquetes y los asientos reservados en las sinagogas. Les agrada que los saluden en las plazas y que la gente los llame Maestro." 

 La humanidad está en un proceso de  cambio de conciencia. Es  la búsqueda de la superación de los individualismos, lo que llaman los científicos, sicólogos o  físicos  la conciencia “egoica”, en la que el ego aparece  como el yo individual, aislado y competitivo.

La causa de este fallo  es la falta de visión del proceso  que va siguiendo la humanidad, no sólo  según la reflexión del evangelio  sino según los avances  de la ciencia cuántica  que descubre un espíritu de unidad  en un YO universal  que abarca a todo ser creado. Estos pasos de universalización  abarcan el acercamiento a  lo llamado transpersonal.

Tù eres tú, yo soy yo  y él es él
pero cuando  estamos   juntos
no somos cada uno uno,
somos  muchos más de tres

Y por eso…

Los que tienen apresado
Al país dentro del  puño
No nos dejan andar juntos
Y procuran enfrentarnos
Porque no les tiene cuenta
Que se junten para derribar  su puerta
Y digamos: ”¡se acabó nuestra paciencia!”
Porque ya sabemos que…



Tù eres tú, yo soy yo y él es él
Pero cuando  estamos   juntos
No somos cada uno uno:
¡Somos  muchos!
¡Somos  mucho más de tres!


Uno de los principios de la  nueva física es el que afirma que la unión de las distintos seres de la naturaleza no se reduce   a una suma de las distintas realidades sino que el todo es  mayor que la suma  de las partes. Las energías de cada uno de los seres no solo se suman sino que se multiplican. Eso es lo que necesitamos para cambiar  le realidad (somos muchos más de los que somos).

Eso nos pide el servicio real en nuestro ministerio.

Para los  teóricos cuánticos -  dice D. O, Murchu -el hecho de que  el todo sea mayor que la suma de las partes fundamenta toda la realidad. Para todo en la vida hay mucho más de lo que podamos ver, La esencia real  y el sentido real están bien profundos, lo cual en realidad significa tanto adentro como afuera del objeto que observamos

Esto tanto a nivel social o político como religioso  hace  tambalearse  las actitudes humanas.

Pone en tela de juicio los ministerios”. Así de verdad  el que tiene un cargo ministerial no se siente alguien superior sino un verdadero servidor, responsable de una misión social.

A nivel eclesiástico también resquebraja las categorías,  los símbolos de poder, hábitos, insignias,  títulos…  y nos  pone en situación de igualdad. Es curioso ver la lentitud  con la que van cayendo  esos símbolos.  Pero  sirvamos- Quien sirve, vale.