SAN PABLO Y MARÍA MAGDALENA…¡FRENTE A FRENTE!
María Magdalena, la que sí conoció a Jesús, su compañera, la verdadera fundadora del cristianismo, desprestigiada por una tradición machista.
Son 21 capítulos de debates imaginarios entre Pablo y María Magdalena, cada cual más candente que el otro. Los autores son José Ignacio y María López Vigil, los mismos de UN TAL JESÚS y OTRO DIOS ES POSIBLE.
Hoy les presentamos:
3 – ¿SON INFERIORES LAS MUJERES?
PERIODISTA Audiencia de Emisoras Latinas, nuevamente con ustedes y nuevamente con dos invitados en exclusiva que ninguna otra radio ha logrado conseguir. Me refiero a san Pablo, el apóstol que tantas epístolas escribió…
PABLO Gracias, gracias por esta nueva invitación.
PERIODISTA … y a María Magdalena, que no sé si tuvo tiempo de leer alguna de ellas.
MARÍA Pues no, la verdad. Ni tiempo… ni podía porque a las mujeres no nos enseñaban a leer.
PERIODISTA ¿Por qué?
MARÍA Porque, como usted puede imaginar, una mujer sin letras es más fácil de dominar.
PERIODISTA Sin letras y sin cabeza. Precisamente sobre las mujeres, en una de sus cartas más conocidas, la Primera a los Corintios, usted, san Pablo, escribió algo, digamos, desconcertante. Le pido a la productora Magaly que lo lea…
MAGALY Quiero que sepan esto: la cabeza de Cristo es Dios, la cabeza del hombre es Cristo y la cabeza de la mujer es el hombre. El hombre es la imagen y el reflejo de Dios, mientras que la mujer es el reflejo del hombre. En efecto, no es el hombre el que procede de la mujer, sino la mujer del hombre.
MARÍA ¿Usted escribió eso, don Pablo?
PABLO Sí, lo escribí.
MARÍA Pero, don Pablo, con todo respeto, ¿quién lo parió a usted? ¿No fue una mujer?
PABLO Sí, claro, mi madre.
MARÍA ¿Y su madre no tenía cabeza? ¿Mujeres sin cabeza dan a luz a mentes tan brillantes como la suya, don Pablo?
PABLO Mi estimada María Magdalena, así está escrito en las Sagradas Escrituras, que primero fue Adán y de Adán nació Eva.
MARÍA ¡Me importa un dátil! Que yo sepa, los varones no pueden parir.
PABLO Fue por una costilla.
MARÍA Así que usted, don Pablo, usted que es un hombre tan estudiado, ¿usted me sale con esas escrituras antiguas, con esa tal costilla, que Jesús nunca mencionó?
PERIODISTA Tenemos una llamada… Aló ¿quién nos llama y de dónde?
MUJER El nombre y el lugar es lo que menos interesa. Soy una mujer. Y me siento ofendida por lo que escribió ese señor Pablo. ¿Quiere escuchar otra “perlita” de las que aparecen en sus cartas?
PERIODISTA Sí, claro, dígame dónde…
MUJER Lea la primera Carta a Timoteo, en el capítulo 2. Lea, para que se asombre.
PERIODISTA A ver, Magaly, rápido, búscame ese texto…
MAGALY Yo no permito que la mujer enseñe ni que ejerza autoridad sobre el hombre. Que se mantenga en silencio. Porque Adán fue formado primero y Eva en segundo lugar. A pesar de esto, la mujer podrá salvarse engendrando hijos.
MARÍA ¿Cómo? ¿También eso enseñó usted, don Pablo? ¿Primero sin cabeza y ahora conejas?
PABLO ¿De qué conejas habla usted? Yo no he mencionado a ese animalito…
MARÍA Usted acaba de decir que las mujeres solo valemos si parimos… como conejas, ¿no?… Que sólo nos salvamos si somos madres… Don Pablo… Usted… ¡usted es un machista!
PABLO Más respeto con la palabra de Dios. Yo escribí lo que ya está escrito en los libros santos. Que el engañado no fue Adán, sino la mujer que, seducida por el demonio, incurrió en el pecado.
MARÍA ¡Y seguimos con la historia de la serpiente y el arbolito!
PERIODISTA Veo que los teléfonos de Emisoras Latinas están calientes… ¿Aló?
HOMBRE Mire, señor periodista, san Pablo ha establecido el orden natural: Dios, Cristo, el hombre, la mujer, los hijos… ¡la familia! La base de la sociedad. Esa la jerarquía querida por Dios.
PERIODISTA ¿Y qué pensaba Jesús de la familia, María Magdalena? Porque en nuestro tiempo en las familias hay tanta violencia, tanto maltrato, tantos abusos…
MARÍA Bueno, eso es de todos los tiempos… familias que no son familias. Yo vi mucho de eso en Magdala.
PERIODISTA ¿Y qué pensaba él de su familia?
MARÍA Jesús quería mucho a su madre, a sus hermanos, a sus hermanas… Pero algunas veces los tuvo que enfrentar porque para él la comunidad era más importante que la familia.
PERIODISTA ¿Cuál comunidad?
MARÍA La que estábamos construyendo para que cambiaran las cosas en nuestro país, para que llegara el Reino de Dios. Me acuerdo de un día hablando en Cafarnaúm. Yo estaba ya con él, en el movimiento. Y desde Nazaret vino su familia a buscarlo… Por lo que andaba hablando lo tildaban de loco y querían detenerlo… Ufff, lo enojado que se puso con su madre a pesar de lo mucho que la quería…
JESÚS Esta mujer que dice que lo que estamos haciendo es una locura, ésa no puede ser mi madre. La cara se le parece, sí, pero no puede ser ella… Mi madre nunca le hizo caso a los chismes. Mi madre fue siempre valiente y me habló siempre de un Dios que quiere ver a todos sus hijos de pie, con la frente bien alta. Ella me enseñó a ser responsable sin preocuparme de lo que dijeran los demás. Esta mujer no es mi madre. Estos tampoco son familia mía. A ninguno de ellos los conozco… Mi madre y mis hermanos y mi familia son otros, los que luchan por la justicia y no ustedes que vienen a estorbar esa lucha.
PERIODISTA Magaly, ¿hay constancia de estos hechos en los evangelios?
MAGALY ¿El enfrentamiento de Jesús con su madre?
PERIODISTA Sí, eso, eso…
MAGALY Pues mira, aparece en el evangelio de Marcos, en el de Lucas y también en el de Mateo…
PERIODISTA ¿Todavía sigue en línea, amigo radioescucha?
HOMBRE Aquí sigo, sí, oyendo a esa loca invitada por ustedes…
Ya entiendo… Esta emisora está esparciendo, como veneno, la perniciosa ideología de género que destruye la familia. ¡Mujeres que quieren vivir como hombres, hombres que quieren ser mujeres! Que Dios los perdone.
PERIODISTA Uff… Nosotros no queremos esparcir nada, sino contrastar opiniones… Hacemos contacto ahora con nuestra reportera Elena Martínez que se encuentra en México, asistiendo a una boda en una de las tantas iglesias del DF… ¿Me escuchas, Elena?
ELENA Perfectamente, Juan Luis. Y dejo abierto los micrófonos para que nuestra audiencia escuche las palabras más solemnes de este rito…
CURA … y prometes amarlo y respetarlo, de hoy en adelante, en lo próspero, en lo adverso, en la riqueza, en la pobreza, en la enfermedad y en la salud, hasta que la muerte los separe?
NOVIA Sí… prometo.
SACERDOTE Ustedes han expresado su compromiso ante la santa madre Iglesia. Así pues, lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.
ELENA Dicen que son palabras que pronunció el mismo Jesucristo y que se refieren a la indisolubilidad del matrimonio.
MARÍA ¿Perdón, qué dijo esa muchacha que dijo Jesús?
PABLO Lo mismo que dije yo. Que la mujer no se separe de su esposo. Esa orden no fue mía, sino de Cristo el Señor. Si entre los esposos hay agravios, que se reconcilien. Porque lo que Dios ha unido…
MARÍA … que no lo separe el varón… ¡el varón!
PABLO ¿Cómo dijo usted, galilea atrevida?
MARÍA El varón. El varón abusivo. Jesús no defendía el matrimonio, sino a las mujeres. Eso era lo que me tenía enferma a mí. Un marido imperioso. Si no le gustaba la comida, me insultaba. Si no se hacía lo que él quería me repudiaba.
PABLO La ley de Moisés permitía al marido repudiar a su mujer.
MARÍA Pues Jesús no hizo ningún caso a la ley de Moisés. Y me dijo a mí: Sepárate de ese demonio que tienes dentro de casa. Yo seguí su consejo y me separé. Y ese consejo de Jesús me sanó, me liberó.
PABLO ¿Y sus hijos, qué hicieron con los hijos?
MARÍA Gracias a Dios, no habíamos tenido ninguno todavía…
PABLO ¡Y usted dice “gracias a Dios”!… ¡Si los hijos son la bendición de Dios! Lastimoso, María Magdalena, lastimoso, ya voy entendiendo mejor su peligroso pensamiento… Como le dije a Timoteo, a pesar de haber tentado al varón arrastrándolo al pecado, a pesar de eso, la mujer podrá salvarse si cumple con sus deberes de madre.
MARÍA ¡Y vuelve la mula al trigo!… O sea que las que no tienen hombre, las estériles, las que no han parido, ¿no se salvan?
PABLO Yo también escribí en otra carta que para Cristo ya no hay varón ni mujer y todos somos uno en Cristo Jesús.
MARÍA ¿Y luego borró con el codo lo que escribió con la mano?
PERIODISTA Tenemos otra llamada… ¿Aló?
CASTILLO ¿Cómo está, Juan Luis? Nuevamente llamo a su programa que está poniendo sobre el candelero la luz que estaba escondida bajo el celemín.
PERIODISTA José María Castillo… Un gusto escucharle de nuevo…
PABLO ¿No me diga que es el mismo embustero que dijo que yo soy un problema?
PERIODISTA No se altere, Pablo, veamos qué tiene para comentar este reconocido teólogo…
CASTILLO El contraste es muy grande entre las actitudes de Jesús hacia las mujeres y las de Pablo.
PERIODISTA ¿En qué nota usted ese contraste, Castillo?
CASTILLO En todo. Jesús habló con las mujeres y Pablo las mandó a callar. Jesús creía en las mujeres, las dignificó. Y Pablo las quería sumisas al padre, al marido. Su pensamiento, Pablo, es abiertamente patriarcal y machista, casi misógino.
PABLO ¡Yo no voy a seguir aguantando tantas insolencias contra mí y contra mi autoridad! Ese hombre es un anticristo. Mejor me voy. ¡Me levanto y me voy!
PERIODISTA Pero, Pablo, de nuevo… ¿cómo se va a ir usted?
MARÍA Don Pablo, ¿por qué no se aplica a usted mismo lo que nos dijo a las mujeres? Manténgase en silencio.
PERIODISTA – Amigos, y especialmente hoy amigas, así llegamos al final de nuestro programa. ¿Ustedes qué piensan? ¿Estamos esparciendo la ideología de género con estos debates? Les recordamos que estamos en las redes sociales. Y en la web donde nos pueden escuchar: www.emisoraslatinas.net Y recuerden: quien tiene preguntas, piensa; quien sólo tiene respuestas, obedece. Estuvo con ustedes, Juan Luis.
TAMBIÉN PUEDES LEER…
José María Castillo. La humanidad de Jesús, capítulo 5, “Jesús y Pablo”. Editorial Trotta 2016
Suzanne Tunc. También las mujeres seguían a Jesús. Editorial Sal Terrae 1999
Elisa Estévez López. Las mujeres en los orígenes del Cristianismo. Editorial Verbo Divino.
Ivone Gebara. El rostro oculto del mal. Una teología desde la experiencia de las mujeres. Editorial Trotta 2002
Publicado en SAN PABLO Y MARÍA MAGDALENA...¡FRENTE A FRENTE!
3 – ¿SON INFERIORES LAS MUJERES?
PERIODISTA Audiencia de Emisoras Latinas, nuevamente con ustedes y nuevamente con dos invitados en exclusiva que ninguna otra radio ha logrado conseguir. Me refiero a san Pablo, el apóstol que tantas epístolas escribió…
PABLO Gracias, gracias por esta nueva invitación.
PERIODISTA … y a María Magdalena, que no sé si tuvo tiempo de leer alguna de ellas.
MARÍA Pues no, la verdad. Ni tiempo… ni podía porque a las mujeres no nos enseñaban a leer.
PERIODISTA ¿Por qué?
MARÍA Porque, como usted puede imaginar, una mujer sin letras es más fácil de dominar.
PERIODISTA Sin letras y sin cabeza. Precisamente sobre las mujeres, en una de sus cartas más conocidas, la Primera a los Corintios, usted, san Pablo, escribió algo, digamos, desconcertante. Le pido a la productora Magaly que lo lea…
MAGALY Quiero que sepan esto: la cabeza de Cristo es Dios, la cabeza del hombre es Cristo y la cabeza de la mujer es el hombre. El hombre es la imagen y el reflejo de Dios, mientras que la mujer es el reflejo del hombre. En efecto, no es el hombre el que procede de la mujer, sino la mujer del hombre.
MARÍA ¿Usted escribió eso, don Pablo?
PABLO Sí, lo escribí.
MARÍA Pero, don Pablo, con todo respeto, ¿quién lo parió a usted? ¿No fue una mujer?
PABLO Sí, claro, mi madre.
MARÍA ¿Y su madre no tenía cabeza? ¿Mujeres sin cabeza dan a luz a mentes tan brillantes como la suya, don Pablo?
PABLO Mi estimada María Magdalena, así está escrito en las Sagradas Escrituras, que primero fue Adán y de Adán nació Eva.
MARÍA ¡Me importa un dátil! Que yo sepa, los varones no pueden parir.
PABLO Fue por una costilla.
MARÍA Así que usted, don Pablo, usted que es un hombre tan estudiado, ¿usted me sale con esas escrituras antiguas, con esa tal costilla, que Jesús nunca mencionó?
PERIODISTA Tenemos una llamada… Aló ¿quién nos llama y de dónde?
MUJER El nombre y el lugar es lo que menos interesa. Soy una mujer. Y me siento ofendida por lo que escribió ese señor Pablo. ¿Quiere escuchar otra “perlita” de las que aparecen en sus cartas?
PERIODISTA Sí, claro, dígame dónde…
MUJER Lea la primera Carta a Timoteo, en el capítulo 2. Lea, para que se asombre.
PERIODISTA A ver, Magaly, rápido, búscame ese texto…
MAGALY Yo no permito que la mujer enseñe ni que ejerza autoridad sobre el hombre. Que se mantenga en silencio. Porque Adán fue formado primero y Eva en segundo lugar. A pesar de esto, la mujer podrá salvarse engendrando hijos.
MARÍA ¿Cómo? ¿También eso enseñó usted, don Pablo? ¿Primero sin cabeza y ahora conejas?
PABLO ¿De qué conejas habla usted? Yo no he mencionado a ese animalito…
MARÍA Usted acaba de decir que las mujeres solo valemos si parimos… como conejas, ¿no?… Que sólo nos salvamos si somos madres… Don Pablo… Usted… ¡usted es un machista!
PABLO Más respeto con la palabra de Dios. Yo escribí lo que ya está escrito en los libros santos. Que el engañado no fue Adán, sino la mujer que, seducida por el demonio, incurrió en el pecado.
MARÍA ¡Y seguimos con la historia de la serpiente y el arbolito!
PERIODISTA Veo que los teléfonos de Emisoras Latinas están calientes… ¿Aló?
HOMBRE Mire, señor periodista, san Pablo ha establecido el orden natural: Dios, Cristo, el hombre, la mujer, los hijos… ¡la familia! La base de la sociedad. Esa la jerarquía querida por Dios.
PERIODISTA ¿Y qué pensaba Jesús de la familia, María Magdalena? Porque en nuestro tiempo en las familias hay tanta violencia, tanto maltrato, tantos abusos…
MARÍA Bueno, eso es de todos los tiempos… familias que no son familias. Yo vi mucho de eso en Magdala.
PERIODISTA ¿Y qué pensaba él de su familia?
MARÍA Jesús quería mucho a su madre, a sus hermanos, a sus hermanas… Pero algunas veces los tuvo que enfrentar porque para él la comunidad era más importante que la familia.
PERIODISTA ¿Cuál comunidad?
MARÍA La que estábamos construyendo para que cambiaran las cosas en nuestro país, para que llegara el Reino de Dios. Me acuerdo de un día hablando en Cafarnaúm. Yo estaba ya con él, en el movimiento. Y desde Nazaret vino su familia a buscarlo… Por lo que andaba hablando lo tildaban de loco y querían detenerlo… Ufff, lo enojado que se puso con su madre a pesar de lo mucho que la quería…
JESÚS Esta mujer que dice que lo que estamos haciendo es una locura, ésa no puede ser mi madre. La cara se le parece, sí, pero no puede ser ella… Mi madre nunca le hizo caso a los chismes. Mi madre fue siempre valiente y me habló siempre de un Dios que quiere ver a todos sus hijos de pie, con la frente bien alta. Ella me enseñó a ser responsable sin preocuparme de lo que dijeran los demás. Esta mujer no es mi madre. Estos tampoco son familia mía. A ninguno de ellos los conozco… Mi madre y mis hermanos y mi familia son otros, los que luchan por la justicia y no ustedes que vienen a estorbar esa lucha.
PERIODISTA Magaly, ¿hay constancia de estos hechos en los evangelios?
MAGALY ¿El enfrentamiento de Jesús con su madre?
PERIODISTA Sí, eso, eso…
MAGALY Pues mira, aparece en el evangelio de Marcos, en el de Lucas y también en el de Mateo…
PERIODISTA ¿Todavía sigue en línea, amigo radioescucha?
HOMBRE Aquí sigo, sí, oyendo a esa loca invitada por ustedes…
Ya entiendo… Esta emisora está esparciendo, como veneno, la perniciosa ideología de género que destruye la familia. ¡Mujeres que quieren vivir como hombres, hombres que quieren ser mujeres! Que Dios los perdone.
PERIODISTA Uff… Nosotros no queremos esparcir nada, sino contrastar opiniones… Hacemos contacto ahora con nuestra reportera Elena Martínez que se encuentra en México, asistiendo a una boda en una de las tantas iglesias del DF… ¿Me escuchas, Elena?
ELENA Perfectamente, Juan Luis. Y dejo abierto los micrófonos para que nuestra audiencia escuche las palabras más solemnes de este rito…
CURA … y prometes amarlo y respetarlo, de hoy en adelante, en lo próspero, en lo adverso, en la riqueza, en la pobreza, en la enfermedad y en la salud, hasta que la muerte los separe?
NOVIA Sí… prometo.
SACERDOTE Ustedes han expresado su compromiso ante la santa madre Iglesia. Así pues, lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.
ELENA Dicen que son palabras que pronunció el mismo Jesucristo y que se refieren a la indisolubilidad del matrimonio.
MARÍA ¿Perdón, qué dijo esa muchacha que dijo Jesús?
PABLO Lo mismo que dije yo. Que la mujer no se separe de su esposo. Esa orden no fue mía, sino de Cristo el Señor. Si entre los esposos hay agravios, que se reconcilien. Porque lo que Dios ha unido…
MARÍA … que no lo separe el varón… ¡el varón!
PABLO ¿Cómo dijo usted, galilea atrevida?
MARÍA El varón. El varón abusivo. Jesús no defendía el matrimonio, sino a las mujeres. Eso era lo que me tenía enferma a mí. Un marido imperioso. Si no le gustaba la comida, me insultaba. Si no se hacía lo que él quería me repudiaba.
PABLO La ley de Moisés permitía al marido repudiar a su mujer.
MARÍA Pues Jesús no hizo ningún caso a la ley de Moisés. Y me dijo a mí: Sepárate de ese demonio que tienes dentro de casa. Yo seguí su consejo y me separé. Y ese consejo de Jesús me sanó, me liberó.
PABLO ¿Y sus hijos, qué hicieron con los hijos?
MARÍA Gracias a Dios, no habíamos tenido ninguno todavía…
PABLO ¡Y usted dice “gracias a Dios”!… ¡Si los hijos son la bendición de Dios! Lastimoso, María Magdalena, lastimoso, ya voy entendiendo mejor su peligroso pensamiento… Como le dije a Timoteo, a pesar de haber tentado al varón arrastrándolo al pecado, a pesar de eso, la mujer podrá salvarse si cumple con sus deberes de madre.
MARÍA ¡Y vuelve la mula al trigo!… O sea que las que no tienen hombre, las estériles, las que no han parido, ¿no se salvan?
PABLO Yo también escribí en otra carta que para Cristo ya no hay varón ni mujer y todos somos uno en Cristo Jesús.
MARÍA ¿Y luego borró con el codo lo que escribió con la mano?
PERIODISTA Tenemos otra llamada… ¿Aló?
CASTILLO ¿Cómo está, Juan Luis? Nuevamente llamo a su programa que está poniendo sobre el candelero la luz que estaba escondida bajo el celemín.
PERIODISTA José María Castillo… Un gusto escucharle de nuevo…
PABLO ¿No me diga que es el mismo embustero que dijo que yo soy un problema?
PERIODISTA No se altere, Pablo, veamos qué tiene para comentar este reconocido teólogo…
CASTILLO El contraste es muy grande entre las actitudes de Jesús hacia las mujeres y las de Pablo.
PERIODISTA ¿En qué nota usted ese contraste, Castillo?
CASTILLO En todo. Jesús habló con las mujeres y Pablo las mandó a callar. Jesús creía en las mujeres, las dignificó. Y Pablo las quería sumisas al padre, al marido. Su pensamiento, Pablo, es abiertamente patriarcal y machista, casi misógino.
PABLO ¡Yo no voy a seguir aguantando tantas insolencias contra mí y contra mi autoridad! Ese hombre es un anticristo. Mejor me voy. ¡Me levanto y me voy!
PERIODISTA Pero, Pablo, de nuevo… ¿cómo se va a ir usted?
MARÍA Don Pablo, ¿por qué no se aplica a usted mismo lo que nos dijo a las mujeres? Manténgase en silencio.
PERIODISTA – Amigos, y especialmente hoy amigas, así llegamos al final de nuestro programa. ¿Ustedes qué piensan? ¿Estamos esparciendo la ideología de género con estos debates? Les recordamos que estamos en las redes sociales. Y en la web donde nos pueden escuchar: www.emisoraslatinas.net Y recuerden: quien tiene preguntas, piensa; quien sólo tiene respuestas, obedece. Estuvo con ustedes, Juan Luis.
TAMBIÉN PUEDES LEER…
José María Castillo. La humanidad de Jesús, capítulo 5, “Jesús y Pablo”. Editorial Trotta 2016
Suzanne Tunc. También las mujeres seguían a Jesús. Editorial Sal Terrae 1999
Elisa Estévez López. Las mujeres en los orígenes del Cristianismo. Editorial Verbo Divino.
Ivone Gebara. El rostro oculto del mal. Una teología desde la experiencia de las mujeres. Editorial Trotta 2002
Publicado en SAN PABLO Y MARÍA MAGDALENA...¡FRENTE A FRENTE!