PALABRAS
A VOLEO
Seguramente
que cuando lean el título de
esta “volea” de hoy,
sabrán enseguida quién es la persona
que está echando a voleo por
todas partes, esta
palabra y cada uno tendrá su opinión del caso que le están
haciendo Porque la palabra que
hora les proponemos es
PERIFERIA
Como
siempre, empezamos con la
etimología que nos suele venir del griego
• El prefijo “peri-“, que puede traducirse
como “alrededor”.
• La forma verbal “phero”, que es sinónimo
de llevar.
• El sufijo “-ia”, que es equivalente a
“acción” o “cualidad”.
El concepto refiere a aquello que rodea un cierto centro, como una zona determinada, un contorno o un perímetro.
Por ejemplo: “El presidente no escucha a quienes están en la periferia: sólo se comunica con aquellos que forman el núcleo más cercano al gobierno”.
“El hombre le recomendó a Mariana que no
camine sola por la periferia del barrio”.
El uso más frecuente de la noción está
vinculado a la geografía y a la organización urbana. Se entiende que la
periferia es la región que está en los alrededores
de un cierto centro. Así, un barrio o una ciudad siempre tienen una
periferia en los alrededores:
Hoy en las ciudades se habla también de suburbios En las viejas
ciudades la gente rica que antes vivía
en el centro ahora se han ido a vivir a
los suburbios, a zonas
periféricas, que sin embargo ahora son centros de poder y riqueza.
Tal vez
hoy debemos hablar más de gente o
comunidades que se han quedado al
margen.
No es sólo cuestión de ciudades
aisladas; En el mundo
entero también se distinguen las
naciones que son como el centro de la humanidad y los pueblos o las personas que se han quedado marginadas; están en los bordes,
en las cunetas de la historia;
son los que no tienen adelantos técnicos, viviendas cómodas, ni armas para imponer su poder; están pues en la periferia, al margen de los avances sociales, políticos económicos del mundo. Y después de hecha esta descripción
“geográfica” podemos meditar en este video
donde alguien aborda de frente el tema de la periferia.
Después de
contemplar y escuchar estas palabras del obispo de Roma en ese solemne escenario de la basílica de
San Pedro, supongo que a muchos se les
ocurrirá la reflexión; pues no es muy
periférico este lugar.
Desde que Pedro y Pablo dejaron las tierras más al margen
del mediterráneo oriental, para predicar a su líder en los barrios periféricos de aquella gran ciudad, aunque lo tuvieron que hacer en zonas marginales o desde las cuevas (catacumbas) donde a veces
se tenían que ocultar.
Esas palabras, las tres juntas para que se mediten mejor, la periferia, los suburbios, las cunetas de la autopista de la historia, el margen, los marginados de la sociedad nos tienen que pedir un examen personal y comunitario;
Nosotros los que nos consideramos seguidores de aquel galileo (¿de Nazaret puede salir algo bueno?), los creyentes de parroquias, congregaciones, comunidades cuando no salimos de nuestros refugios de vida más instalada , los que
admiramos las palabras del actual
“sumo pontífice” pero nos
mantenemos en nuestros centros… sería bueno que de verdad nos asomásemos a la periferia y nos preguntemos ¿Qué podemos hacer para arriesgarnos por esos caminos periféricos, no los de las autopistas, sino los de terracería,? ¿Cómo podemos descentrar nuestra vida personal y comunitaria y centrarnos en los márgenes de la historia? Entonces podremos comentar lo bien que habla el papa sin que se nos caiga la cara de vergüenza por escurrirnos dela periferia.