DOMINGO
CHOC CHE QUEMADO VIVO POR FANÁTICOS “CRISTIANOS”
Publicado el 11
junio, 20203 comentarios en DOMINGO CHOC CHE QUEMADO VIVO POR FANÁTICOS
“CRISTIANOS”
El Abuelo
Domingo, Tata Mingo, vivía en la aldea Chimay, cerca de San Luis Petén. Era un
gran Ajilonel, un maestro herbalista, un científico Maya experto en medicina
natural. También era Ajq’ij, Guía Espiritual Maya, comprometido con preservar y
transmitir el conocimiento ancestral sobre la protección de Madre Naturaleza y
su medicina, a las nuevas generaciones y al mundo. El Abuelo Domingo, junto a
otros sabios Abuelos y Abuelas Q’eqchi’, trabajó incansablemente para sacar a
la luz el valor de la sabiduría Maya. #JUSTICIAPARADOMINGO
Guatemala:
cristianos queman vivo a un Guía Espiritual y Médico Maya
Fecha: 8 junio
2020
Autor:Itzamná
Ollantay
Medio: Telesur.
El fatídico caso
de nuestro hermano Domingo Choc, es sólo un iceberg en un horizonte del
colonialismo religioso en el que como países estamos sumidos.
El pasado 6 de
junio del presente año, en la Aldea Chimay, Municipio de San Luis, Petén, a 230
Km al norte de la ciudad de Guatemala, un numeroso grupo de personas quemaron
vivo a Don Domingo Choc, acusándolo de “brujo”, como consta en un video que
inmediatamente subieron a las redes sociodigitales.
Chimay es una
Aldea maya q’echí empobrecida, conformada por un aproximado de 250 familias (el
idioma es q’echí y castellano). La última vez que visité la zona, contabilicé
cerca de 6 iglesias evangélicas en dicha Aldea, aparte de la imponente capilla
católica. Hay más iglesias que escuelas. En el video se mira que el asesinato
se produce en el centro poblado, en presencia de varias personas corriendo en
diferentes direcciones. Se miran equipos de celulares tomando fotos o grabando
el video del hecho.
La víctima,
envuelta en llamas, corre varios metros hacia las viviendas, mientras varios
hombres intentan impedir cualquier tipo de ayuda. Al final la víctima cae… El
video lo publican con el título: “Lo quemaron por brujo”.
Un día después,
una colega de Don Domingo Choc, publica una nota narrando que: Don Domingo Choc
era un Guía Espiritual, Médico Maya. Integrante de equipos de investigación
científica sobre plantas medicinales. Además, detalla que Don Domingo, junto a
otros guías y médicos, redactaba un libro sobre medicina ancestral.
¿Por
qué quemaron vivo a Don Domingo?
Los asesinos son
genéticamente maya q’echis, pero espiritualmente cristianos. Lo matan por
“brujo”. Es decir, por practicar su espiritualidad maya, y por promover su
conexión con la Madre Tierra en defensa de la Vida. En toda Abya Yala, y Chimay
no es la excepción, los principales culturicidas en los últimos tiempos son y
fueron los cristianos pentecostales (evangélicos y católicos). Incluso, el
genocidio cometido por militares, en Guatemala, en la década de los 80 del
pasado siglo, tenía móvil religioso pentecostal (indios idólatras deben morir
para salvar Guatemala para Cristo, era la consigna para el militar evangélico
pentecostal E. Ríos Montt).
Si bien las
teologías católicas progresistas incorporaron en su narrativa el concepto de la
inculturación, a finales del pasado siglo, e incluso en los últimos tiempos
hablan de la interculturalidad religiosa, en las teologías pentecostales
(bibliólatras) no existe ninguna posibilidad para el reconocimiento o diálogo
con el “Otro” diferente (llámese espiritualidades indígenas).
El monoteísmo y
el cristocentrismo llevan al creyente a matar al “Otro” diferente Para el
cristianismo pentecostal, el indígena para ser cristiano debe de matar su
espíritualidad indígena y aceptar en plenitud a Cristo como su único Dios
verdadero, como el único camino de salvación.
”Las
prácticas espirituales indígenas despiertan la ira inclemente del Dios
castigador, celoso”.
En este sentido,
el cristianismo pentecostal, al igual que el cristianismo de la cristiandad, en
países multiculturales, está condenado a cometer las peores aberraciones
sanguinarias como las que se cometió con el Maestro y Médico Domingo Choc. Su
monoteísmo (un solo Dios) y su prepotencia cristológica (Cristo es el único
camino para llegar a Dios) se constituyen en su traba y en su contradicción
fulminante: predicar a Dios matando al que no profesa su fe. Al parecer, las
aberraciones cristianas encuentran sus raíces en conceptos o teologías
aberrantes como el monoteísmo o el cristocentrismo.
En este sentido,
es imposible ser cristiano e indígena al mismo tiempo, porque el indígena que
renuncia a su alma (espiritualidad cósmica) no puede ser indígena, ni puede ser
cristiano quien practica simultáneamente otras espiritualidades que no sea únicamente
el culto al “único Dios verdadero”. Un Dios que es macho, blanco, único… en un
planeta multicolor.
¿Quiénes
mataron al Maestro y Médico Domingo Choc?
En sociedades
racistas, ante este dantesco suceso difundido en redes sociodigitales, se asume
que son indígenas salvajes, primitivos, quienes quemaron vivo a otro indígena.
Y esto no es del todo cierto. Los asesinos, cual inquisidores (justicieros de
la verdadera doctrina cristiana) lo hicieron en proclama y defensa de su fe
cristiana. En ese sentido, la salvajada lo cometieron los cristianos
pentecostales de habla q’echí. El ser indígena es diferente al ser cristiano. Y
desde mi perspectiva, por las dificultades del monoteísmo y cristocentrismo, es
imposible ser indígena y cristiano al mismo tiempo.
El pentecostalismo
cristiano, por su “salvajismo culturicida” nos tiene que motivar a repensar la
permisividad indígena frente a la presencia de dichas iglesias en nuestros
territorios. Jurídicamente no estamos obligados a permitir y/o aceptar la
presencia de pastores, biblias, iglesias… en nuestros territorios.
Nuestro
derecho colectivo a la autodeterminación y el derecho al consentimiento nos
faculta a decidir si aceptamos o no a las iglesias en nuestros territorios.
Porque, al parecer el fatídico caso de nuestro hermano Domingo Choc, es sólo un
iceberg en un horizonte del colonialismo religioso en el que como países
estamos sumidos.
CARTA DEL
COMUNICADOR MAYA JUAN J. QUIB, AMIGO Y COMPAÑERO.
Fuente: Facebook de: Juan J. Quib
Autor: Maya Juan
J. Quib
Conocí al Abuelo
Domingo Choc Che en una reunión de la Asociación de Concejos de Guías
Espirituales Releb’aal Saq’e’ (ACGERS), con quienes trabajo desde el 2010.
El Abuelo
Domingo, Tata Mingo, vivía en la aldea Chimay, cerca de San Luis Petén. Era un
gran Ajilonel, un maestro herbalista, un científico Maya experto en medicina
natural. También era Ajq’ij, Guía Espiritual Maya, comprometido con preservar y
transmitir el conocimiento ancestral sobre la protección de Madre Naturaleza y
su medicina, a las nuevas generaciones y al mundo. El Abuelo Domingo, junto a
otros sabios Abuelos y Abuelas Q’eqchi’, trabajó incansablemente para sacar a
la luz el valor de la sabiduría Maya.
Por ello era
parte de un equipo transdisciplinario de científicos mayas, guatemaltecos y
europeos que trabajábamos juntos en dos grandes proyectos de investigación y
desarrollo con la Universidad de Zurich en Suiza, el University College London,
en Inglaterra, y la Universidad del Valle de Guatemala.
Hace tan solo
unos meses el Abuelo Domingo caminaba por el bosque aledaño a su comunidad con
nuestro equipo de la Unidad de Antropología Médica, en un viaje etnobotánico
para identificar especies de plantas medicinales.
Él explicaba a
dos jóvenes estudiantes cómo hacer las invocaciones para pedir permiso a la
esencia de la planta antes de cortarla, incluía todo el aspecto de la sabiduría
y la ciencia Maya ancestral sobre su uso, cómo prepararla, almacenarla,
aplicarla. Estábamos trabajando un inventario de especies medicinales para
poder documentar y proteger el conocimiento Q’eqchi’ de forma que quedara
evidencia que todo esto es conocimiento indígena.
El Abuelo estaba
ayudando a escribir un libro en el que quedaría la evidencia de la ciencia
herbal maya Q’eqchi’, como un mecanismo de documentar la propiedad intelectual
de su Pueblo. Él era parte de un esfuerzo de años por crear el Popol Jay de
Poptún, la Gran Casa del Concejo, la cual incluía la implementación de un
jardín botánico para preservar las especies medicinales que están amenazadas
por la destrucción de Petén.
El Abuelo Domingo
trabajaba con otros grandes médicos tradicionales de ACGERS para identificar
los hábitats de estas especies y poder recrearlos en este jardín. Soñaba con
poder tener resguardadas las plantas, las semillas, porque cada vez es más
difícil encontrarlas. A medida que la selva petenera es destruida sin piedad,
el Abuelo Domingo soñaba con tener este espacio donde asegurar la existencia de
estas plantas, donde poder enseñarle a las nuevas generaciones de Ajilonel el
uso de la medicina ancestral, donde poder transmitir la espiritualidad Maya, la
Ciencia Maya, a quien tuviera el corazón abierto para recibirla.
El Abuelo Domingo
es un héroe del Pueblo Q’eqchi’. EL Abuelo Domingo ha sido convertido ahora en
un mártir ante el grotesco asesinato público al que fue sujeto. Repudiamos este
acto cruel y lleno de prejuicio e ignorancia. Exigimos justicia en el
esclarecimiento de su asesinato. Más importante aún, necesitamos visibilizar
este tipo de persecución contra quienes practican la Medicina Tradicional y la
Espiritualidad Maya en Guatemala, necesitamos crear consciencia y educarnos
como sociedad para aprender a conocernos entre guatemaltecos, dejar de
temernos, de perseguirnos. Necesitamos entender, reconocernos, respetarnos en
nuestra diversidad.
Abuelo Domingo,
Tata Mingo, ha iniciado su trascendencia espiritual al no-tiempo, oramos por su
alma, acompañaremos el camino espiritual que debe seguirse para que sea uno con
la Luz Divina. Su ejemplo de vida nos guiará en el camino que hay que abrir en
Guatemala, porque es tiempo de reescribir esta historia de temor y de odio
hacia una de paz y respeto, de aprendizaje mutuo. Honramos su vida, Abuelo.
Gracias por su valentía. Li q’awa’ ku’ xtikib’ li xjalb’al li xwanjik sa’ li
jun chik li yuam sa’ li kutaank K’at. Li xchahimal ut li xmusiq’ej moko tsachq
ta, li xsachiq sa’ ruuchich’oc a’an teokq li xb’ehil naq moko ta b’aanumanq ta
chik jusutaq li railal xe’ xbaanu li komon. Na koxloq’i li xyuam, sa’ komonil
to k’anjelaq re xpatz’b’al naq li chaqrab’ ta t’aneeq sa’ xb’een li xe’
b’aanunk re li na’leb’ ut re naq tuqlaaq li nawon arin Guatemaal ut chixjunil
ri ruchich’och. Mónica Berger de White.
¿Quién era
Domingo Choc Che, el guía espiritual maya asesinado en Guatemala?
A Domingo
lo llamaban el “Abuelo Ku” por sus amplios
conocimientos,
por su respeto a la madre naturaleza y a su comunidad.
Domingo formaba
parte de investigaciones científicas sobre medicina maya, que en colaboración
con universidades de Suiza e Inglaterra, buscaban la creación de documentos y
libros sobre el antiguo conocimiento maya de las medicinas naturales.
El asesinato de
Domingo Choc Che, el pasado 6 de junio en la comunidad de San Luis,
departamento de Petén en Guatemala, despertó la indignación de la población,
que considera que su muerte violenta representa no solo una injusticia, sino la
máxima expresión de la discriminación y los estigmas por cuestión de etnia y
fe.
Reconocido
científico maya, Choc Che era un experto en medicina natural y trabajaba en la
Asociación de Concejos de Guías Espirituales Releb’Aal Saq’E (Acgers).
Considerado un
experto en medicina natural maya, Choc Che tenía un “conocimiento profundo de
las plantas, de las oraciones que hacía, una formación que traía desde su
infancia, de sus abuelos maternos y que fue cultivando hasta convertirse en un
experimentado”, explica el también guía espiritual Rolando Quib en entrevista
exclusiva para teleSUR.
Según recuerda
Quib, quien conoció a Domingo hace más de 15 años atrás, “era una persona muy
humilde, muy trabajadora, un médico maya muy entregado al conocimiento de las
plantas medicinales, a la atención comunitaria, pero sobretodo, también era un
campesino de su trabajo, que cultivaba y vivía con ello”.
Por
el asesinato de Domingo Choc Che esta mañana la Fiscalía de Distrito de Petén
con apoyo de la @PNCdeGuatemala realiza cinco allanamientos en aldea, Chimay,
San Luis para ejecutar cinco órdenes de captura #JusticiaDomingoChoc
pic.twitter.com/aVLZOBclPF
—
PrensaComunitaria (@PrensaComunitar) June 9, 2020
Compromiso
con el conocimiento
Refiere Quib que,
en los últimos años, Domingo estaba en un proyecto científico internacional en
el que comenzaba a revalorizar o socializar el conocimiento que tienen los
médicos quekchíes, grupo étnico en el norte de Guatemala.
Al respecto, la
antropóloga médica de la Universidad del Valle de Guatemala, Dra. Mónica
Berger, afirma que Domingo formaba parte de investigaciones científicas sobre
medicina maya, que en colaboración con universidades de Suiza e Inglaterra,
buscaban la creación de documentos y libros sobre el ancestral conocimiento
maya de las medicinas naturales.
Un vasto
conocimiento que, al decir de Quib, Choc Che ponía a disposición del bien de
ayudar a las personas, de contribuir con el saber popular, que utilizaba para
“que la humanidad no estuviera enferma, que se curara y cuidara”.
La
Alianza de Mujeres y Mujeres Indígenas de Guatemala por el acceso a la justicia
condenaron el asesinato de Domingo Choc Ché, Ajilonel Maya q'eqchi. #SanLuis
#Petén pic.twitter.com/2X4q24lTM0
—
PrensaComunitaria (@PrensaComunitar) June 9, 2020
Según el también
guía espiritual, José Che, Domingo tenía más de 20 años de ser Ajilonel
(herbalista), y realizaba largos y lejanos recorridos en busca de las plantas
con las que sanaba.
Mientras, Rolando
Quib recuerda que las dolencias tratadas por Domingo podían ser físicas como la
diabetes, varios tipos de cáncer, el susto o el miedo, fracturas, la epilepsia,
e incluso se realizan operaciones espirituales en diversas partes del cuerpo,
“no importando que grupos de creencias tengan”.
Reconocimiento
a su labor
Dentro del mundo
de los guías espirituales, de los médicos mayas, lo conocían como el “Abuelo
Domingo”, y dentro del concepto quekchí, lo llamaban el “Abuelo Ku” por sus
amplios conocimientos.
Además, por su
respeto a la madre naturaleza, a su comunidad, a las personas con las que
convivía, así como a sus pacientes y a su forma de actuar. Un guía espiritual
guatemalteco a quien, afirma Quib, “le tenían mucho respeto”.
Trasfondo
de violencia
El aprecio y
reconocimiento hacia su profesión no era generalizado. Domingo vivía en la
aldea Chimay, en ella, según explica a Rolando Quib, “existían diferentes
grupos religiosos que le molestaba mucho su trabajo con la medicina natural, su
conocimiento de plantas, el uso de velas, y de ahí se comenzó a manejar el mal
concepto de brujo”.
Bajo la falsa
premisa de brujería y de haber enfermado espiritualmente a una persona que
murió en un centro asistencial, al guía espiritual se le llevó a la muerte
envuelto en llamas, en su aldea Chimay, a más de 370 kilómetros al noreste de
Ciudad de Guatemala.
Para la Dra.
Mónica Berger, el asesinato del respetado Ajq'ij (guía espiritual) habla de
prejuicios estigmatizantes que ven equivocadamente a los herbalistas como
brujos. Además, considera su muerte como haber “quemado una biblioteca”, pues
su amplio conocimiento implica la pérdida de todo un caudal que nunca pudo ser
documentado completo.
Al menos 20 personas han sido asesinadas en los últimos años por considerarlos "brujos". I Foto: Ecoreinita |
Para la escritora
de la agencia de noticias Prensa Guatemalteca, Quimy De León, el asesinato de
Domingo no es un hecho aislado, pues desde la invasión y la colonia, ha habido
un estigma y una persecución a personas que hacen prácticas espirituales
diferentes a la judeocristiana. Según De León, este fenómeno no ha parado de ocurrir,
y en los últimos años se han afianzado en las comunidades.
También explica
que el discurso de vincular a las poblaciones originarias, en este caso mayas,
con la hechicería y la brujería, el diablo y la maldad, proviene desde la
invasión y de la propia configuración del racismo en nuestra América. “Eso,
digamos, es un discurso que se ha prolongado, se utiliza hasta la fecha y
considera que los pueblos indígenas son personas sin alma y que lo único que
hacen en relación con sus prácticas espirituales es la brujería”, comentó.
En
la última semana, además del asesinato de Tata Domingo,también asesinaron a
Alberto Cucul,defensor de la naturaleza en la Laguna Lachuá. ¡Justicia para
ambos! ¡Justicia para los defensores de la Madre Tierra! #JusticiaDomingoChoc #JusticiaAlbertoCucul
✊����
Vía
@saracurruchich pic.twitter.com/UaP1JujwTO
—
Ruda (@ruda_gt) June 9, 2020
De acuerdo con un
listado realizado por Prensa Guatemalteca, al menos 20 personas han sido
asesinadas en los últimos años por considerarlos brujos.
Sin embargo,
argumenta De León que los médicos mayas como Domingo Choc realizan un trabajo
preventivo, de educación a personas y a familias, trabajan la salud mental, el
sistema musculoesquelético, la pediatría. “Se podría decir que son el primer
nivel de atención, que ellas resuelven lo que el Estado no resuelve en estas
comunidades lejanas”, enfatiza.
Nuestra
solidaridad con la familia de Tata Domingo Choc Ché, maestro, científico maya
experto en medicina natural, comprometido con la investigación, con preservar y
transmitir el conocimiento ancestral a las generaciones del presente y del
futuro. pic.twitter.com/BgF3HxLhDQ
—
ONU Mujeres Guatemala (@onumujeresgt) June 8, 2020
“Esto no fue un
crimen cometido por una muchedumbre tumultuosa, como suelen ser los
linchamientos en Guatemala (...) No es una cosa espontánea perpetrada por una
muchedumbre. En este caso fueron cinco o seis personas que deliberadamente, en
pleno toque de queda, se dirigieron a buscarlo y a sacarlo de su casa. Incluso
lo retuvieron por horas. No tenemos información precisa, pero lo tuvieron horas
hasta que amaneció. Y luego, le prendieron fuego”, detalla De León.
El Ministerio
Público de Guatemala, por medio de la Fiscalía Municipal de Poptún, investiga
el hecho en el cual el Abuelo Domingo perdió la vida. El reproche y condena a
estos sucesos ha llegado a todas las esferas de la sociedad, quienes los han
calificado como un crimen imperdonable y una gran pérdida del conocimiento
ancestral maya.
TOMADO DE: Radialistas apasionados y apasionadas