Ella
es una de esas estrellas y luciérnagas que iluminan nuestra vida.
Tomasita
empezó a trabajar a sus 70 años muy buena edad para empezar una
vez más a trabajar y lo hizo en su barrio donde tenemos una olla
común para niños desnutridos y para mamás lactantes embarazadas
desnutridas, donde comienza la desnutrición para los niños.
Tomasita
se levanta temprano se arregla bien y bien arregladita antes de las 8
de la mañana llega para limpiar todo para que sus niños encuentren
sus mesas y sus sillas ordenaditas y limpiecitas..
Cuando
van llegando niños. A todos saluda con alegría y con su sonrisa. No
cocina los grandes peroles pues ella tiene 70 años. Pero sí pasa la
mañana barriendo como danzando y limpiando todo con mucha alegría
lava las verduras,corta las cebollas y ayuda en lo que que haga falta
siempre sonriendo y nos repite la olla es mi vida, son mis niños y
niñas.
Tomasita
dejó de trabajar a los 90 años, muy buena edad para dejar de
trabajar, es un decir pues sigue trabjando, dejó de trabajar por su
salud, por su edad, pero siguió trabajando con su alegría ayudando
a los demás nos recibe con un cariñoso abrazo una sonrisa hasta
casi un poquito pícara. Y con mucho amor.
Mas
adelante en otro chispazo les contaré cómo sigue trabajando. Como
recibe en su casita invidentes y claro los atiende muy bien, y a una
señora ya muy mayor que estaba triste y deprimida, le devolvió la
alegría al recibirla y acogerla en su casita.
En
síntesis la vida de Tomasita es una luciérnaga juguetona en medio
del túnel de la vida con sus obscuridades, su vida es una estrella
que nos guía y da el norte en la oscuridad de la noche no se hace
eso con muchas palabras o grandes discursos, sino simplemente con la
luz de su sonrisa, de su abrazo de su ayudar a todos con su amor.
Y
al despedirnos nos da su Bendición despacito con mucha devoción que
los bendiga y acompañe Papa Dios.
Juntos
demos gracias a Dios por Tomasita que es una vida vivida con amor,
con alegría con esperanza al servicio de los demás hasta los 90
años, gracias. Por esa luz en nuestra vida, la luz de Jesús.