Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

30 de marzo de 2022

PALABRAS A VOLEO

SANTA O SANTO-

Martín Valmaseda


Esta  vez  les  lanzamos a voleo  una  palabra   abusada  que  en  publicaciones  eclesiásticas sale  por  todos  los  rincones  unas veces  dedicada a personas  y  otras  a instituciones  empezando  por   la misma iglesia,  esa palabra  es muy  fácil  de pronunciar, dos  sílabas,  pero  más difícil  de  vivir y  de demostrar  su  realidad (para  eso  hace  falta  dinero,,,¡qué  curioso!, porque la  palabra  que  hoy  salta a voleo  por  los  aires  es

SANTO, SANTA 

Como  un  ejemplo  de lo  absurdo  del  uso de  esta  palabra  piensen  en  la  santa  inquisición. Se  llamaba  santa  a  ese organismo  que  torturaba  y mataba  a  los  herejes

Otras  veces   se  declara  santa  a personas  que  después  se demuestra  que tal vez  no fueron  malas  personas  pero  tanto  como  para  llamarlas  santas... ¡por favor!  y  en  otras  ocasiones,   como  actualmente se intenta  proclamar  santo  rápidamente,  no  porque no lo fuera sino para  tapar  detalles   de su  muerte...

me  estoy  refiriendo  a  ese tristemente  olvidado  Juan Pablo I,  que parece  que  no   existió  por  la  brevedad  de su pontificado y por  pero   dejemos a Jesús López  que  ya  es el  tercer libro  que  escribe  sobre  el  futuro  santo. Les  dejo   con Jesús (López)

NUEVO LIBRO SOBRE JUAN PABLO I

"El Papa que mataron. La trama oculta"

JESÚS LÓPEZ SÁEZ 

ECLESALIA

Acaba de salir mi libro de El Papa que mataron que lleva por subtítulo La trama oculta, publicado por la editorial Última Línea. Habiendo presentado recientemente Albino Luciani. Caso abierto (2018), ¿tiene sentido escribir otro libro sobre Juan Pablo I? La razón es que ha habido dos novedades importantes, una oficial y otra mafiosa. En primer lugar, la publicación en Italia de la biografía oficial del proceso de beatificación, Albino Luciani. Giovanni Paolo I. La biografía presenta diversos aspectos que hay que comentar y diversas omisiones que hay que señalar. Además, presenta un dato ocultado durante cuarenta años: la denegación de la autopsia al cadáver del papa, solicitada por el doctor que tenía que hacer el diagnóstico sobre la causa de la muerte y firmar el certificado de defunción.

En segundo lugar, la publicación en Estados Unidos del libro del gánster Anthony S. Luciano Raimondi When the Bullet hits the Bone, Cuando la bala golpea el hueso. Raimondi, que fue integrante de la mafia de los Colombo, confiesa en su libro haber participado en el asesinato de Juan Pablo I. Fue requerido por Marcinkus, presidente del Banco   Vaticano, para eliminar al papa “de una manera propia para un papa”, “sin violencia”.

Ha habido dos novedades importantes, pero no son las únicas. Por ejemplo, el caso Moreno Luciani, sobrino del cardenal, desaparecido “trágica y misteriosamente” el viernes 2 de mayo de 1975. Es la primera vez que se aborda este tremendo enigma relacionado con el misterio del papa desaparecido. Se dice que Albino Luciani comunicó a un pariente suyo esta confidencia: “Me la han querido hacer pagar”.

Es una novedad también el hecho, ocultado durante cuarenta años, que es presentado como la pastilla del mayordomo. Sorprende que el mayordomo le diera una pastilla al papa, cuando le correspondía hacerlo a sor Vincenza, que era enfermera. Sorprende también que este mayordomo sustituyera a primeros de septiembre a los hermanos Gusso, que fueron despedidos por el secretario irlandés del Papa, John Magee, “amigo de Marcinkus”.

Tal y como se ha anunciado, Juan Pablo I será beatificado el 4 de septiembre de 2022. Se le beatifica por su “santidad ordinaria”. Sin embargo, se oculta cómo murió y por qué. Se le beatifica, pero no se le hace justicia. La beatificación está viciada de raíz. Hay maniobra, encubrimiento, engaño. Mientras tanto, la gente sigue diciendo: “El papa que mataron”, la mayoría de los obispos latinoamericanos están convencidos de que el papa Luciani murió asesinado (Serafini) y el mundo contempla una vez más el escándalo vaticano.

Con muchos creyentes, grupos y comunidades, el autor se remite a ese tribunal donde se juzga (ya desde ahora) el verdadero sentido de la historia, proclamando la palabra del Señor que dice: “¡Ay de vosotros, que edificáis los sepulcros de los profetas que vuestros padres mataron!”, “ellos los mataron y vosotros edificáis”, “se pedirá cuenta”, “sí, os lo repito, se pedirá cuenta” (Lc 11, 47-51).

¿Comprenden  ahora  como  la  palabra  santo  puede  ser  una  falsificación  de alguien  que  no  lo  fue  tanto; o  en   el  caso de Albino Luciani  un modo  de distraer  la  atención de las  causas del martirio  del  futuro  beato  y  Santo Juan Pablo I?