Las familias de muchas regiones latinoamericanas (y sobre todo las venezolanas) siempre tienen en la memoria el listado musical que se escuchará en los hogares que, con mucho o con poco festejan la llegada del último mes y del último día del año, cargado de simbolismos y esperanzas.
Las familias de muchas regiones latinoamericanas (y sobre todo las venezolanas) siempre tienen en la memoria el listado musical que se escuchará en los hogares que, con mucho o con poco festejan la llegada del último mes y del último día del año, cargado de simbolismos y esperanzas.
Según la región, las edades y la inclinación tradicional de cada núcleo familiar así será lo que se escuche, lo que se baile, lo que se cante. Lo que es seguro es que hay algunos temas musicales que no faltarán porque ya hacen parte del imaginario colectivo de Fin de Año en esta zona del mundo que es la América Latina.
En esa lista memoriosa que ya se va afinando, la parranda tendrá que contar con la voz de Tony Camargo. “Yo no olvido al año viejo/ porque me ha dejado cosas muy buenas…”
Camargo, cantante mexicano nacido en Jalisco en 1926 y fallecido en su país en 2020 puso la voz al tema del colombiano Crescencio Salcedo para inmortalizarlo desde 1954 cuando lo grabó con los arreglos del también mexicano Rafael de Paz.
En predios venezolanos
no faltarán par de gaitas entonadas por Betulio Medina con su agrupación
gaitera “Maracaibo 15”: “Qué te pasa viejo año/ qué te pasa/ que ya tienes tus
maletas preparadas...” y “Compay, venga
un abrazo/ que esta noche el año se termina…”.
A propósito de la gaita
zuliana, el periodista también zuliano Elmer Niño, nos señaló: “El país todo se
“prende” al oír ese cuatro, maraca, furro, charrasca y tambor acompañados por
voces que invocan a la Virgen de Chiquinquirá, a las tradiciones locales, a la
crítica social, a las añoranzas, al Lago y el Puente, en fin, al sintonizarse
con la gaita comienza el olor de la
Navidad, el Fin de Año, el mes de las hallacas, la llegada del Nuevo
Año. Aparecen los conjuntos emblemáticos (Cardenales del Éxito, Saladillo,
Estrellas del Zulia, Rincón Morales, Barrio Obrero y muchos más) , las voces
insignes, alcanzando la cúspide con el maestro de escuela Ricardo Aguirre, El
Monumental, quien marca un antes y un después de él; se reconocen los
compositores, hoy legendarios, tales como Bernardo Bracho, Rafael Rincón
González, Jesús Reyes ‘Reyito’, José “Chinco” Rodríguez, Eurípides Romero,
Heberto Pedraja, Renato Aguirre, Firmo Rincón entre un centenar de cultores
tanto en conjuntos como de intérpretes y autores “químicamente” originales en su impronta
personal. Y ¿cómo no mencionar las voces femeninas que dieron el tono agudo
necesario para vigorizar el jolgorio y animar aún más la colectividad?
Hablamos de Lula López, Ingrid Alexandrescu, Gladys Vera, Raiza Portillo,
Fulvia Padrón…
Sostenida entonces por
una estructura métrica literaria original, con intérpretes, conjuntos y
compositores dotados de prodigiosas virtudes vocales, perfecto dominio musical
y “versos y estribillos” milagrosos, para decirlo con Ramón Soto Urdaneta, uno
de los mejores productores de Radio en
el estado Zulia, este género
pascuero ha tenido que batirse a sangre y fuego contra la metamorfosis
mercantilizante que, codiciosamente, la
quiere permutar con la salsa, el merengue, la ranchera, el porro y… bueno, y
hasta el reguetón”. Santa palabra.
Año nuevo, vida nueva
Por supuesto que previo
a la llegada del fin de año hemos escuchado hasta el cansancio al inolvidable
ecuatoriano Julio Jaramillo: “Campanitas
que vais repicando/ Navidad vais alegre cantando...” y el burrito sabanero que
va camino de Belén aderezado con el inmenso repertorio navideño de los
venezolanos. Y no se olvida a Billo
Frómeta con “Año nuevo, vida nueva, más alegres los días serán...” ni a Los
Tucusitos “Un feliz año pa’ ti, un feliz año pa’ él, un feliz años pa’ todos,
un feliz año...”. Pero cuando ya falte el cuarto de hora final para recibir al
nuevo año, como todos los años, la voz del falconiano Néstor Zavarce emergerá
con Cinco pa’ las doce y no habrá quien lo destrone. “Las campanas de la
iglesia están sonando/ anunciando que el año viejo se va…”
Los más añejos tendrán
a mano “Las uvas del tiempo” que delataron la infinita nostalgia del poeta
Andrés Eloy Blanco en el exilio que padeció debido a su pensamiento político y
social. Imaginamos que cada familia tiene el tema exacto con el que recibe al
nuevo año. En el caso de muchos hogares de la tierra de Bolívar el tema es Viva Venezuela, tal y como lo hiciera por
primera vez Un Solo Pueblo con la majestuosa voz de Francisco Pacheco en plan
protagónico. Luego muchas familias colocan otra voz imprescindible para ratificar
la alegría junto a la conciencia. Sí. Apenas comienza el año se escucha a Alí
Primera con su tema La Patria Buena. “Apréndete la guaracha y lucha por la
unidad/ que toda la gente va con la esperanza en la mano/ buscando darle a la
patria caminos de dignidad”. Cosas de cada quien.
Después del ritual musical se prende la rumba buena timbalero con salsa pareja y guarachas para bailar, que la parranda es pa’ amanecer y al que se duerma lo ... No olvidamos la radio, por supuesto. La noche de llegada del año nuevo la radio destrona a la televisión, de verdad. Cada quien con su gusto e inclinación, escoja, prepárese y no permita que el odio ni el resentimiento habiten en el hogar para recibir al año que está llegando. Y si decide pasarlo en la plaza, igual es el deseo: felicidades a todos, que amor es lo que anda.
Las tradiciones
*Hay que ponerse ropa
interior de color amarillo para garantizar el amor y la prosperidad. Esta
conseja se volvió Ley aunque en estos tiempos
no se consigue mucho amarillo interior en los mercados, porque es que
además no vale ponerse la del pasado año: hay que estrenar.
*Hay que tener lentejas
preparadas para que sea el primer bocado del nuevo año porque eso garantiza la
prosperidad familiar, sobre todo en la cocina.
*Hay que colocar papas
con su cáscara y papas peladas debajo de la cama principal. Cuando llegue el
nuevo año hay que sacar una papa sin mirarla. Si es de las peladas el año será
bueno. Imaginen. (Igual hay que sacarlas todas)
*Hay que romper una
copa de cristal de la celebración de fin de año para que se rompa la
adversidad y no toque al año naciente.
(Eso está muy difícil ahora)
* Hay que salir con una
maleta y darle la vuelta a la cuadra para garantizar que viajaremos en el nuevo año. No dicen nada del pasaporte
que ya saben que sacarlo o renovarlo es un suplicio que no vale una maleta. Y
Además, ahora dando vueltas con la maleta te pueden atracar.
* Hay que echar agua
hacia la calle, pero de espaldas para que la mala suerte se vaya. La verdad es
que termina el piso de la casa mojado y es probable que algún vecino nos
insulte.
*Con cada campanada que
anuncia la llegada del nuevo año hay que comerse una uva. Esto es para honrar
la memoria del gran poeta venezolano, oriental, Andrés Eloy Blanco y a su
legendario poema “Las uvas del tiempo”.
“Aquí es de la
tradición que en esta noche,
cuando el reloj anuncia
que el Año Nuevo llega,
todos los hombres
coman, al compás de las horas,
las doce uvas de la
Noche Vieja.
Pero aquí no se abrazan
ni gritan: ¡FELIZ AÑO!,
como en los pueblos de
mi tierra;
en este gozo hay menos
caridad; la alegría
de cada cual va sola, y
la tristeza
del que está al margen
del tumulto acusa
lo inevitable de la
casa ajena…
...¡El Renombre, la
Gloria..., pobre cosa pequeña!
¡Cuando dejé mi casa
para buscar la Gloria,
cómo olvidé la Gloria
que me dejaba en ella!”
*Hay que remover arroz
en un cuenco junto con dinero en monedas, para que la prosperidad no se vaya
del hogar. ¿Monedas? Todavía no se hace
de manera virtual ni por pago móvil.
*Perfumar el hogar es
necesario para mover las energías. Una varilla de incienso es suficiente.
*Procurar tener
mandarinas, que es un símbolo de prosperidad, dicen.
*Evitar por todos los
medios el daño ambiental a la naturaleza, a los animales, a niños y personas
mayores. No a la pirotecnia, al ruido que masacra.
Feliz año 2023
Temario musical
elemental
Cinco pa’ las doce
Viejo año
El año viejo
Año nuevo
Amigo
Abriendo puertas
Son mis deseos
Venga un abrazo
Un Feliz Año pa’ ti