Algo podemos decir y se ha dicho sobre el amor, sobre la libertad, sobre la paz, sobre Dios, pero Dios es mucho más de lo que podemos decir de ´Él.
Nos podríamos aplicar aquello que decía Antonio
Machado:
¿Tu verdad? ¡No!, la verdad y ven conmigo a
buscarla, la tuya guárdatela.
La Verdad –probablemente- es una búsqueda continua.
4. Yo soy el camino, la verdad y la vida, yo soy la
luz.
¿Y si volviéramos al Evangelio de Jesucristo?
La doctrina y el dogma
son lo que son y dicen lo que dicen, que a duras penas se aproxima a la
realidad última. El Evangelio es vida y salvación.
Por otra parte el mundo clerical no es portavoz de Dios, ni mucho menos. El clero debería ser humilde servidor del pueblo de Dios.
¿Y cómo acercarnos al
evangelio, a la luz, a ser sal de la tierra?
Termino la homilía
pensando que Iglesia recuperará credibilidad si seguimos las palabras de Isaías
de la primera lectura de hoy:
Veremos cuando compartamos tu pan con el hambriento, tu oscuridad se tornará mediodía, cuando destierres de ti la opresión, el gesto amenazador y la maledicencia… Entonces brillará tu luz en las tinieblas, tu oscuridad se volverá mediodía.
Tomás Muro
Religión digital