MARTÍN VALMASEDA
LOS BUENOS Y LOS MALOS: No me refiero a los niños que es fácil saber la calidad moral de cada uno. Es bueno el que hace caso a su mamá y no mete las manos en el tarro de mermelada y niño malo el que en su casa no hay mermelada y se la tiene que buscar por otros medios.
Pero ahora me refiero a cuando esos niños se hacen grandes y las normas para la bondad y la maldad se las dictan otros.
Esos dictadores
suelen ser gente
con cultura, con frecuencia
clérigos, o con
otra cultura distinta,
por ejemplo periodistas o
políticos.
En ese
caso, lo que
está bien o
lo que está
mal ya se discute
más. Porque la
gente mayor ya no
mete las manos en la mermelada, las mete en la propiedad privada.
Es triste
ver en la
sociedad que hay
pocas personas que
tienen mucha propiedad
privada, pero mucha gente
con poca propiedad privada, a
veces privados de
toda propiedad.
El
que tiene mucha
propiedad privada suele
tener medios para
conseguir mucha más. En
cambio hay otros
que de pequeños
no tenían en
su casa mermelada
y de mayores
tampoco tienen propiedad
privada; al contrario se
encuentran privados de propiedad y de
medios para conseguirla. Se dice
que para conseguir
esa propiedad hace falta tener
algo llamado trabajo, que no todos
lo tienen.
Los que tienen la propiedad privada a veces tienen empresas que sirven, para conseguir mas propiedad y además para dar trabajo a la gente y pagarles con su dinero privado.
Eso
pasa en todo el
mundo. Así hay naciones
con mucha, muchísima propiedad
privada, a la
que llaman capital,
y esos
países se llaman
buenos y modelos del
capitalismo para la humanidad.
En cambio
hay muchos más países despojados de propiedad
y la poca
que tienen se
la quitan los
países que tienen su pequeña
propiedad acusándolos de malos y
diciendo que la propiedad
privada es regalo
de Dios a
ellos que, son
los buenos- Fíjense hasta
donde hemos llegado a poner
a Dios en
ridículo
Ese Jesús de
Nazaret enseñó a sus
amigos a tener las
cosas no en propiedad privada,
sino en común
dando a cada uno
lo que necesitaba,
hasta mermelada y
claro compartiendo el pan
porque ¿qué van
a hacer con mermelada sin pan.?
Y así empezaron a
vivir los amigos
de Jesús, aunque al
paso del tiempo
se les va
olvidando y creen que
ser buenos amigos de
Jesús es ir a misa
los domingos pero el
pan y la
mermelada para ellos
solos ¿ y piensan que son buenos?
Creo que
ya les expliqué lo que es
ser malo o bueno
partiendo el pan
y todo lo
demás pero con
un poquito de
mermelada. Amén.