MARTÍN VALMASEDA
Nos falta el AIRE, digo que nos falta escribir sobre él; porque si nos falta AIRE en los pulmones, estamos perdidos. Ese es el problema que el ser humano está destruyendo, la capa de aire que rodea la tierra la estamos emponzoñando. Están mezclados con el aire otros gases productos de las calefacciones, los motores, el aire "acondicionado" (malas condiciones tiene). En tiempos de los primeros filósofos (siglo VI antes de Cristo) se podía decir no hay más cera que la que arde o no hay más leña que la que se quema... Hoy arden demasiadas cosas en el mundo lo que es una de las causas del cambio climático. Respiramos gases mezclados con el aire.
En algunos países (México) se prohíbe circular vehículos algunos días a la semana por orden de matrícula... Pero algunos listos y ricos compran dos automóviles que alteran según los días prohibidos, y estamos en las mismas. Los filósofos antiguos dirían hoy si volvieran que los elementos del mundo son agua contaminada y con plásticos fuego que produce gases irrespirables, aire mezclado con esos gases y tierra cubierta de cemento, asfalto o césped plástico en los campos de fútbol. Pues ¡vaya mundo que estamos haciendo!
Se está
mejor en la
luna que es un
lugar sin aire, sin
agua, sin tierra (solo polvo y
rocas lunares) y sin fuego.
Pero
dense prisa de irse a
la luna porque
van a llegar los
astronautas de USA con
coca y pepsi, perfumes caros, acondicionadores de
aire, sin aire y luces
artificiales y se va
a poner la luna
imposible también.
Y ya
están los cuatro elementos vitales.
Un amigo
me decía que faltaba el quinto:
el vino, pero eso no
lo he
encontrado en los
filósofos presocráticos de aire.