Oración al Creador
Señor y Padre de la humanidad,
que creaste a todos los
seres humanos
con la misma dignidad,
infunde en nuestros
corazones
un espíritu de
hermanos.
Inspíranos un sueño de
reencuentro,
de diálogo, de justicia
y de paz.
Impúlsanos a crear
sociedades más sanas
y un mundo más digno,
sin hambre, sin
pobreza,
sin violencia, sin guerras.
Que nuestro corazón se
abra
a todos los pueblos y
naciones de la tierra,
para reconocer el bien
y la belleza
que sembraste en cada
uno,
para estrechar lazos de
unidad,
de proyectos comunes,
de esperanzas compartidas.
Oración cristiana
ecuménica
Dios nuestro, Trinidad
de amor,
desde la fuerza
comunitaria
de tu intimidad divina
derrama en nosotros
el río del amor
fraterno.
Danos ese amor que se
reflejaba
en los gestos de Jesús,
en su familia de
Nazaret y
en la primera comunidad
cristiana.
Concede a los
cristianos
que vivamos el
Evangelio
y podamos reconocer a
Cristo
en cada ser humano,
para verlo crucificado
en las angustias
de los abandonados y
olvidados de este mundo
y resucitado en cada hermano que se levanta.
Ven, Espíritu Santo,
muéstranos tu hermosura
reflejada en todos los
pueblos de la tierra,
para descubrir que
todos son importantes,
que todos son
necesarios,
que son rostros
diferentes
de la misma humanidad
que amas. Amén.
Dado en Asís, junto a
la tumba de san Francisco,
el 3 de octubre del año
2020, víspera de la Fiesta del
“Poverello”, octavo de mi Pontificado
Franciscus
Colaboración de Juan García de Paredes.