Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

11 de abril de 2024

EL CUENTO DE WILLY. CAPÍTULO 31

 El cuento de WILLY 

Historia de un niño algo especial que de mayor lo siguió siendo… a su manera

Martín Valmaseda

 CAPITULO 31  

YO ME APUNTO

Don  Bruno  en  su  tiempo  de convaleciente  andaba  deprimido,  aburrido y hundido. El  fracaso de la  librería  junto  con la enfermedad  le  había bajado  los  ánimos.  Por eso al oírle decir  eso,  Paula  la mamá y  la  pareja  se miraron ilusionados.  Willy  exclamó,: “Pues fíjate  que  hasta  la emisora  que  hiciéramos  podía servir  para  varias cosas, por ejemplo: hacer propaganda de los  libros  que  se te  han  quedado almacenados sin poder vender,  educar  a la gente del  barrio,  informar  de lo que sucede en  el país,  porque muchos están en  la luna… Saltó  entonces Telma  e informar a la  gente de la capital  de nuestra lucha en  Verapaz  contra  las minas de zinc que nos van a asfixiar y… y usted  Doña  Paula,  la veo  que está muy  quieta… solo sale a la calle para ir al  supermercado  y tiene usted  una bonita voz  de locutora…

-“yo?- la mamá  puso  cara  de asombro… Saltó  Willy: ya  se lo  he dicho yo,  que con  un hijo,  solo  podía meterse  en  una actividad.

Don  Bruno  que había  estado  muy pasivo, puso  cara de capitán  general  y  empezó a organizar  una vida  nueva  en  aquella  familia. Willy agarró  el  celular (móvil  como dicen  en España)  y llamó  a un  amigo  que habían  echado de radio  Sonora. Puso  voz  de cronista deportivo.   Buenas tarde,  señor  Victorino, le habla a usted de la nueva emisora  del  barrio,  La barranca  de  Santa  Marta.

El amigo que ya había adivinado la voz de Willy contestó: “y qué emisora es esaesa?”… Willy   dudó un poco… pues… es…la   emisora… “LIBROS A LA CALLE” que junta la lectura y la radiocomunicación.  La cultura de papel y la de las ondas radiales.

El llamado Victorino se dio cuenta de que aquello, entre bromas iba    en serio y en 20 minutos estuvo en casa de Willy.

Doña Paula ya había preparado una meriendilla y lo primero que tuvo que hacer  Willy,  en  aquella reunión improvisada es explicar por qué se le había ocurrido aquel nombre.

-“Sí  dijo  porque  mi papá  que  se ha ofrecido para empezar  esta radio,.  Vendía libros… mejor  intentaba vender,  pero no le compraban… y pienso que  la  radio no  tiene  que hacer olvidar  la lectura de libros…

Intervino Don Bruno:  Pero  yo  no  tengo experiencia  en  esto,  si  Victorino el  amigo de Willy se junta a este invento,  el  dirá  como llamamos a la nueva radio y  cómo  empezamos.

Victorino  iba  a  contestar,  pero  en ese momento  suena  el  timbre de final del  capítulo, y ¡zas! Todos se quedan  callados.  Tendremos que esperar  al  próximo  capitulo  32 a ver  cómo  sigue.

_______

Quieres leer todos los capítulos del

 Cuento de Willy

Ve al siguiente enlace  👉