MARTÍN VALMASEDA
-NIÑOS EN
MISA
En muchas parroquias
se fija una
hora de los
domingos para la
"misa de niños",
el estilo de
esas eucaristías depende
de la imaginación, del
cura de si es capaz
de hacerse como
niño. La característica de
la misa, en
donde hay muchos
niños es la movilidad
del templo. Los chavales
pueden hacer que
el templo tiemble.
La diferencia
entre estas misas en América
latina y Europa,
es que allí
suele acompañar a
los niños también
algún perro, nadie se asusta
por ello, al
menos en barrios
populares.
Claro, como dije, todo depende
de si el
celebrante tiene espíritu infantil
y juega con
él en la
celebración; para entrar en
el reino de
los cielos. En los
tiempos antiguos dicen
las crónicas, cuando
se comulgaba con
pan de verdad,
las migas que
sobraban de la consagración
por encima del mantel,
se las daban
a los niños.
Otro detalle
de las misas
con niños es que
estos no entran y salen
piadosamente andando, sino
más piadosamente, corren y
saltan por los
escalones que separan el
altar de los
"simples" fieles.
Lo triste
es que cuando esos niños y
niñas hacen su
primera comunión también muchos hacen
la última y
ya no aparecen en
misa más que cuando
"tienen que" ir a algún funeral.
Las misas
de niños, para niños , con
niños son reflejo
de las críticas
que salen en revistas
o páginas de internet, pidiendo que, a
ver si cambia
la misa y
volvemos a partir
el pan en
una comida de
verdad como se
hacía en aquellos
primeros tiempos. ¿Lo veremos
o no?