El 5 de diciembre, el presidente colombiano visitó a Mujica en su casa en las afueras de Montevideo para homenajearlo con la Cruz de Boyacá, la máxima distinción civil que otorga el gobierno colombiano.
Durante esa visita, Petro manifestó una “profunda conexión desde la juventud” con Uruguay y comparó su propia trayectoria como guerrillero con la de Mujica. “Ambos terminamos dejando las armas porque entendimos que la paz era lo más importante y lo más revolucionario de una sociedad”, afirmó el presidente colombiano.
José Mujica informó que
el cáncer se expandió por su cuerpo y se despide: “Hasta acá llegué”
El ex presidente
uruguayo ahora tiene un tumor en el hígado y no se someterá a ningún otro
tratamiento. El histórico dirigente uruguayo, de 89 años.
El expresidente de
Uruguay José Mujica asegura que morirá en su chacra, en Rincón del Cerro, en
las afueras de Montevideo (EFE/ Sofía Torres)
El ex presidente
uruguayo José Mujica anunció en abril de 2024 que tenía cáncer de esófago. La
noticia recorrió el mundo y políticos internacionales de primer nivel lo
llamaron a su chacra en Rincón del Cerro para enviarle fuerza. Mujica se
recuperó. Se sometió a 32 largas sesiones de radioterapia y el tumor que lo
afectaba, en principio, desapareció. Pero las nuevas noticias sobre su salud no
son alentadoras.
El cáncer de esófago
que afectó inicialmente a Mujica ahora se expandió por el resto de su cuerpo,
según informó el histórico dirigente en una entrevista con el semanario Búsqueda.
Lo anunció en la sala de su casa, cerca de su esposa, Lucía Topolansky, y entre
lágrimas, cuenta la crónica.
“El cáncer en el
esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque
soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas. No me cabe ni un
tratamiento bioquímico ni la cirugía porque mi cuerpo no lo aguanta”, detalló
Mujica.
Mujica contó que no se
someterá a ningún otro tratamiento para tratar la enfermedad ya que le pidió a
los médicos que no lo hagan “sufrir al pedo”. “Que me pichicateen y cuando me
toque morir, me muero. Así de simple como te lo digo. Estoy condenado, hermano.
Hasta acá llegué”, le dijo a la revista uruguaya.
El ex mandatario uruguayo
–que sigue siendo uno de los políticos más populares del país, junto al
presidente Luis Lacalle Pou– es ahora un “viejo en el final”, que lo único que
quiere es dedicarse a trabajar en su chacra mientras el cuerpo se lo permita.
La entrevista con Búsqueda fue una suerte de despedida de su barra política y de los uruguayos. “Lo que quiero es despedirme de mis compatriotas. Es fácil tener respeto para los que piensan parecido a uno, pero hay que aprender que el fundamento de la democracia es el respeto a los que piensan distinto. Por eso, la primera categoría son mis compatriotas y de ellos me despido. Le doy un abrazo a todos”, dijo y –según la nota– sus ojos se llenaron de lágrimas.
La primera reunión como
presidente electo que tuvo Yamandú Orsi fue con el ex mandatario José Mujica y
su esposa Lucía Topolansky. También se despidió de sus compañeros y los
simpatizantes de su espacio político y aseguró que hace tiempo que las
principales decisiones políticas no pasan por su “rancho”. “Ahora, tengo mis
simpatías y cuando puedo dar una manito, la doy. Pero no soy un viejo
consultor, que me tienen que pedir permiso”, sostuvo.
Mujica asegura que no
dará más entrevistas y tampoco tendrá apariciones públicas. “Lo que pido es que
me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi
ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”,
señaló.
El ex presidente ya no
quiere hablar de la actualidad política, aunque todavía sea un referente en la
opinión pública: sus comentarios han tenido incidencia hasta el final. De
hecho, Mujica fue el principal apoyo político de Yamandú Orsi, quien el próximo
1° de marzo asumirá la Presidencia en Uruguay.
El expresidente
uruguayo José 'Pepe' Mujica llega de sorpresa a un acto durante la campaña
electoral que llevó a la Presidencia a Yamandú Orsi.
Pero ahora lo que busca
es ponerle un punto final a su vida. Una vida que, según él, le ha dado “muchos
premios”: “El principal es que estoy a cuatro meses de cumplir 90 años. Mirá la
vida que he tenido. Es un desastre”, comentó.
En las últimas
elecciones, el Movimiento de Participación Popular (MPP), el espacio de Mujica,
tuvo una votación histórica y tendrá una bancada importante en el próximo
período de gobierno. Él se siente “orgulloso” de esto, algo que le permite irse
“tranquilo y agradecido”.
Enfermo de cáncer,
Mujica recorre todos los días un poco la chacra en su tractor y acomoda las
cosas para las generaciones que vayan a quedar. Ese predio está a nombre de su
esposa y lo heredará su sector político. Para los que vengan, compró un tractor
de USD 28 mil, así tienen “fierros nuevos”.
Mujica sabe que se
morirá en su chacra. Y quiere que lo entierren allí, al lado de donde está su
perra Manuela.